El Real Madrid está muy pendiente de la situación de Domilson Cordeiro dos Santos, más conocido como Dodo. El brasileño del Shakhtar Donetsk de 23 años lleva varios años en la agenda de los blancos y, en especial, de Juni Calafat, su principal valedor. Es lateral derecho, una de las posiciones que los madridistas tendrán que reforzar de cara a la próxima temporada.
El jefe de ojeadores del conjunto madridista maneja grandes informes sobre un lateral derecho del que aseguran desde Valdebebas que “aunque la falta algo de físico”, ya que mide 1,66 metros, “es rápido y con el balón en los pies tiene mucha calidad”. Un futbolista de una gran proyección al que pudieron ver muy de cerca los técnicos madridistas en las dos últimas temporadas, ya que completó los cuatro partidos que los ucranianos han jugado contra los blancos en la fase de grupos de la Champions.
El Real Madrid lleva varios años muy pendiente de un joven que se formó en el Coritiba y que en 2017 dio el salto a Europa para recalar en el Shakthar. Tras una primera temporada en Ucrania en la que no gozó de muchos minutos y otra cedido en el Vitoria Guimarães, regresó para hacerse el dueño del lateral derecho. En este tiempo ha sido un fijo año tras año y no ha dejado de progresar jugando partidos de gran nivel en Champions como ante el Real Madrid, el Inter de Milán o frente al Manchester City. También ha sido internacional con las categorías inferiores de Brasil.
Dodo, que ha reconocido públicamente que sueña “con jugar algún día en el Real Madrid”, es un lateral derecho que destaca por su recorrido y talento ofensivo. Combina velocidad en conducciones con talento para el regate. Pisa con facilidad la línea de fondo y tiene visión de juego para poner pases atrás en busca de asistencias a sus compañeros. Además, posee un enorme golpeo de balón.
Libre y extracomunitario
Dodo tiene un valor de mercado de 20 millones de euros y tenía contrato con el Shakhtar hasta 2025, pero la invasión rusa a Ucrania lo ha cambiado todo. El brasileño, que ha podido escapar del conflicto y actualmente se encuentra en su país, llegaría libre y sin necesidad de esperar al mercado de verano. No obstante, hasta que Vinicius no reciba la nacionalidad española, algo que se está haciendo de rogar demasiado por Valdebebas, los blancos no podrían ficharle al tener el cupo de extracomunitarios lleno.
Hay que recordar que el conflicto que se está viviendo en Ucrania ha provocado una decisión tajante de la FIFA para proteger a los jugadores que se empleaban tanto en territorio ucraniano como en Rusia, permitiéndoles salir con la carta de libertad y firmar por otro club como futbolistas libres.