Una de las razones, quizá la principal por delante del orgullo o el dinero, por la que el PSG no ha querido traspasar a Mbappé al Real Madrid ha sido por la imposibilidad de encontrar un sustituto de nivel en el mercado. Y no será porque no lo intentaron porque el pasado domingo, mientras Haaland jugaba su partido ante el Hoffenheim, emisarios del PSG negociaron con su agente, Mino Raiola, las condiciones de un traspaso del noruego, que el propio jugador rechazó cuando su representante le informó después del encuentro que el Borussia Dortmund ganó 3-2.
Haaland era el elegido por los dueños qataríes del PSG para sustituir a Mbappé. Ni Richarlison, muy del gusto de Leonardo, ni Lewandowski o Harry Kane, los recomendados de Pochettino, el único jugador que en Qatar se veía como opción aceptable para sustituir a Mbappé era el delantero noruego del Borussia Dortmund.
Los dirigentes del PSG, obedeciendo las órdenes llegadas de Qatar, telefonearon a Mino Raiola, representante de Haaland, a la misma hora que el delantero estaba disputando el Dortmund-Hoffenheim, para trasladarle una oferta… con su correspondiente comisión, claro. Al representante de Haaland, que ha cerrado este verano con el PSG el fichaje de Donnarumma, le convencieron las condiciones económicas que le propuso el club parisino.
De la negociación con el Dortmund se encargarían directamente los dueños del PSG, sabedores que contaban con el colchón económico de los 180 millones de la oferta del Real Madrid por Mbappé. Sólo les faltaba atar un cabo, pero el más importante: la opinión de Haaland.
Y fue precisamente el delantero noruego quien rechazó irse al Paris Saint-Germain. Haaland tiene muy claro que lo mejor para continuar su carrera es completar esta temporada en el Borussia Dortmund y después elegir entre sus pretendientes. Al joven crack le ilusiona especialmente jugar al lado de Mbappé y el camino más corto y más rápido para conseguirlo puede ser aguardar esta temporada y juntarse en el verano de 2022 en el Real Madrid.
