En los últimos dos partidos del Real Madrid en la Liga Santander, los blancos han sufrido una cacería en cuanto a entradas e incluso más de una agresión. Frente al Rayo Vallecano en Vallecas y ante el Cádiz en el Santiago Bernabéu, últimos dos encuentros antes del Mundial de Qatar, el VAR perdonó dos expulsiones perjudicando a los madridistas.
El pasado lunes en Vallecas, el Real Madrid salió derrotado frente al Rayo Vallecano. Durante la primera mitad de aquel partido se produjo una acción que pudo marcar el encuentro. El defensor local, Iván Balliu, tuvo que ser expulsado tras propinarle un guantazo en la cara a Vinicius. El VAR decidió no llamar al árbitro de campo y la acción se quedó sin ser sancionada ni con amarilla.
Iván Balliu, antes de jugar en el Rayo Vallecano, pasó por equipos como Almería, Metz o Arouca. Pero antes, en su juventud, pasó por las categorías inferiores del Barcelona, donde se crió, llegando a jugar incluso en el primer filial. Ese pasado culé y conociendo que Balliu es reincidente en una agresión sobre Vinicius, refleja que el guantazo del pasado lunes fue premeditado.
Tras ese tropiezo, el Real Madrid venció al Cádiz el pasado jueves en el Santiago Bernabéu y los de Ancelotti volvieron a sufrir otra agresión que no fue sancionada. Vinicius recibió una cacería de patadas y agarrones, pero la agresión de los gaditanos le tocó, esta vez, al otro joven brasileño de ataque.
Otra agresión con pasado culé
Durante la primera mitad, el defensor cadista, Fali, agredió a Rodrygo pegándole con el brazo en el cuello y tirando al carioca sobre el suelo. Esa acción quedó sin sanción. No fue ni falta y el VAR volvió a no avisar al colegiado de campo. Dos acciones de expulsión que se fueron sin sancionar, perjudicando de esta manera al Real Madrid.
Fali, al igual que Balliu, también tiene pasado azulgrana. El central valenciano también jugó en el Barcelona B en la temporada 2018/2019 procedente del Nàstic de Tarragona. El central culé también la tuvo con Vinicius, donde los dos vieron amarilla, tras recriminarle dicha acción contra su compañero carioca.