«Su periodo de adaptación ha terminado. Ha demostrado una buena versión y puede mejorar. Ha hecho buenos partidos, está recuperado de la pequeña lesión que tuvo. Está motivado y contento de estar aquí. Necesitaba este periodo de adaptación, como todos, pero ya ha terminado». Estas palabras, pronunciadas por Carlo Ancelotti en la previa del encuentro que enfrentará en la tarde del domingo a Real Madrid y Sevilla en el estadio Santiago Bernabéu, confirmaban que el galo ya ha cambiado su estatus. Ha subido de nivel.
En Bérgamo, Mbappé marcó un antes y un después. Cierto es que ese día sintió unas leves molestias musculares que le obligaron a dejar el campo a los 37 minutos, pero también es verdad que marcó por primera vez la diferencia dentro del terreno de juego. El gol que abrió el marcador para el Real Madrid contra la Atalanta tuvo su sello personal.
De manera curiosa, la primera vez que se observó al Mbappé que deslumbró con el PSG y Francia con la camiseta del Real Madrid coincidió con su entrevista a Canal+ Francia, donde habló de todo. Desde el entorno del jugador galo aseguran que Kylian, por fin, se ha liberado. De repente, todo empieza a encajar para el delantero.
Mbappé siempre ha sido feliz en el Real Madrid, pero ahora todas las piezas del puzzle están en su sitio, lo que le permite disfrutar. Y esto, obviamente, se traduce en un mejor rendimiento del galo dentro del terreno de juego. El compromiso de Kylian desde el primer día ha estado fuera de toda duda, pero el cierto que durante sus primeros meses no se ha sentido todo lo cómodo que esperaba.
Le ha costado adaptarse, pero, sobre todo, se le ha hecho muy duro poder ser feliz. Su sueño de niño, ese que tenía de jugar en el Real Madrid, no lo estaba disfrutando por el bloqueo mental que tenía. Su último año en el PSG fue muy duro mentalmente. Las presiones parisinas le llevaron al límite y le han pasado una factura que ha tenido que pagar el conjunto blanco en estos primeros meses. Pero por fin parece que todo empieza a cuadrar.
La libertad de Mbappé
En el Real Madrid han tratado de cuidar a Mbappé. Cuando las cosas no fluían dentro del terreno de juego, tanto Ancelotti como el cuerpo técnico siempre han arropado a un jugador que está llamado a marcar una época dentro del club blanco.
Ancelotti también destacó lo que se observa en cada partido del Real Madrid, que Kylian está completamente liberado de tareas defensivas, aunque debe ser decisivo cuando se presenta. «A Mbappé no le pido estar involucrado en el juego porque su talento es el desmarque. Le pedimos que mejore en la continuidad. Es lo que le pedimos y es lo que tiene que hacer de forma más frecuente. Además, tenemos jugadores para meterle ese pase al desmarque», aseguró el entrenador del conjunto blanco.