El miércoles el Real Madrid se clasificó tras protagonizar unas de sus peores eliminatorias dentro del ciclo que le ha permitido ganar seis de las últimas 11 Champions. Resulta del todo menos paradójico que lo volviera a conseguir ante el mejor Atlético de los últimos años que además se vio agraciado con un gol a los treinta segundos y un penalti fallado por Vinicius. Todo hacía indicar que esta vez la suerte le sería esquiva a un Madrid que de menos a más durante el partido y mostró más ambición por evitar los penaltis durante la prórroga.
El aficionado madridista estará hoy feliz por la clasificación y preocupado por el rendimiento de su equipo esta temporada, mientras que el colchonero volverá a respirar por la misma herida de siempre con el Madrid en Europa. Simeone se mostraba muy orgulloso del partido de su equipo hasta el punto que lo obligó a dar una vuelta de honor en una derrota en octavos de final. Quizás nadie respete tanto al Madrid como el Cholo Simeone y quizás ahí resida su mayor limitación para batir a un Madrid que ayer pedía un correctivo a gritos.
Resulta ofensivo que para muchos analistas el partido deba encapsularse en ese penalti anulado a Julián. Que golpeó el balón dos veces no creo que nadie lo dude tras las últimas repeticiones, por lo que ahora se cuestiona la norma. Al parecer el VAR debía haber concedido un gol ilegal. En un partido en el que hubo dos penaltis no señalados a favor del Madrid, el recuerdo colectivo que quedará es que los blancos fueron favorecidos porque se anuló un gol que la regla dice que es ilegal.
Sin duda esto aumentará la leyenda negra de un Madrid que en los últimos derbis se ha visto perjudicado recurrentemente por las decisiones arbitrales. El pisotón de Tchouaméni, los tres penaltis no señalados en el Bernabéu hace un año o el arbitraje de Cuadra Fernández en septiembre del 23 en el Metropolitano son buenos ejemplos de lo que cuento. La leyenda negra va por un lado y los hechos por otro.
En cualquier caso, lo único que ha hecho el Madrid es comprar tiempo. Con este rendimiento será imposible que gane esta Champions. El Arsenal espera en unos cuartos muy complicados. Además el Madrid ha perdido para el partido de Londres a Tchoaumeni, aunque cabe decir que ayer recuperó al mejor Camavinga.