Eden Hazard quiere más protagonismo en el Real Madrid. El belga busca reivindicarse esta temporada y para ello se ha preparado a conciencia. Está ante su momento definitivo en el club, una vez que ha dejado atrás las lesiones que han mermado su rendimiento desde su llegada. Reinventado en el ataque madridista, se encuentra en el mejor estado físico posible, hasta el punto de haber sorprendido a todo el mundo en Valdebebas y, hasta el momento, en los minutos que ha jugado tanto en verano como en el comienzo liguero ha dejado sensaciones más que positivas.
El atacante del conjunto blanco inicia su cuarto curso en el club con la moral por las nubes. Sobre el césped, se ve a un Hazard que quiere disfrutar sobre el terreno de juego. Parece que ya no le preocupan los percances que pueda sufrir, una vez que la placa de su tobillo, que tantos problemas le dio, le ha sido retirada. Una vez superados todo tipo de contratiempos, busca afrontar la que debería ser su temporada definitiva.
El belga sabe que no ha cumplido con las expectativas generadas con su fichaje en 2019, pero no tira la toalla. Esta campaña será en el que deba reivindicarse y está dispuesto a hacerlo. Así lo demuestra su preparación a lo largo del verano. En el club alucinan con su estado de forma. Nunca antes habían visto a un Hazard tan fino, tan comprometido y tan integrado en la dinámica del vestuario.
A pesar de ello, tendrá muy complicado hacerse un hueco en el once. La competencia ha aumentado considerablemente en las últimas temporadas y Ancelotti ahora tiene otras prioridades para las bandas. Mientras que Vinicius es indiscutible en la izquierda, en la derecha le han tomado la delantera al belga Valverde y Rodrygo. Algo que ha llevado al técnico a buscarle una nueva ubicación en su esquema.
Más libertad, mayor polivalencia
Carlo Ancelotti está decidido a inventarse un nuevo Hazard. Al entrenador del Real Madrid parecen haberle convencido los argumentos presentados por el jugador este verano y está dispuesto a darle un nuevo rol. En la constante búsqueda de recursos del italiano, ha decidido reconvertirle en falso 9 o, en su defecto, hacer de él un segundo delantero.
Las nuevas demarcaciones del ex del Chelsea le llevan a abandonar prácticamente los costados, donde se consolidó como uno de los mejores del mundo vistiendo la elástica blue. Ahora, puede convertirse en un jugador más polivalente y gozar de una mayor libertad de movimientos y de asociación, algo que ya le pasa con Bélgica, donde Roberto Martínez le ha instalado también por detrás de sus puntas.
Como se ha visto en este último mes, los resultados son más que esperanzadores. Hazard completó una buena pretemporada haciendo de Benzema cuando este no estaba y, sin ir más lejos, contra el Almería sorprendió posicionándose por detrás del galo. Su entrada al terreno de juego sirvió de gran ayuda al equipo, siendo el iniciador de la jugada del gol del empate, encontrando entre el muro defensivo indálico a Vinicius, que propició el tanto de Lucas.