Todas las miradas apuntaban a Gabri Veiga. Es uno de los chicos de moda del fútbol español y en el estadio Santiago Bernabéu iba a vivir uno de los grandes exámenes del curso. Escenario grande y ante un Real Madrid que le observa desde la distancia, pero que no deja de mirarle. Los blancos saben que la Premier le acecha, que el Nápoles ha intentado cautivarle, pero desde Chamartín se mira con atención el desarrollo de un futbolista que a los 22 minutos dejó clara su calidad. Recogió un balón en su campo, aguantó la embestida de Nacho y puso un gran balón que quedó en nada, ya que la acción fue anulada por fuera de juego.
El resto de su partido fue normal. Como el Celta en general. Dejó detalles de su calidad y casi todo lo que hizo lo hizo bien, aunque lejos de firmar una actuación brillante. En la única oportunidad que tuvo de inquietar la meta de Courtois, falló en el control. Eso sí, lo suficiente para dejar claro que está preparado para dar el salto a un equipo de mayor nivel que el gallego, ya sea este mismo verano o, si lo prefiere, dentro de dos. Pasada la hora de partido fue sustituido por Óscar, ex canterano madridista.
Su futuro
El Real Madrid no se ha puesto en contacto con el Celta por Veiga porque no lo tiene que hacer. Aunque los blancos no son partidarios de pagar cláusulas y a pesar de que la relación con la directiva gallega es mucho mejor que tiempo atrás, también tienen claro que si quieren fichar al gallego sólo será a través de esta fórmula. Aunque por el momento nadie en el club ha activado la maquinaria para ello.
En Valdebebas llevan tiempo siguiendo a un futbolista con un enorme talento y los informes que manejan de él son excelentes. En lo deportivo, en el Real Madrid destacan su gran técnica, algo que están convencidos de que mejorará aún más, su potente físico, especialmente su poderoso tren inferior, y su sacrifico dentro del campo. La posición del gallego es la de interior, aunque también puede jugar de pivote o de mediapunta. Además, tiene llegada y un potente disparo. En lo humano, en la entidad saben que Gabri es un futbolista joven, pero con la cabeza amueblada, muy educado y con otras ambiciones, además de la pelota. De hecho, estudia periodismo.
El que sí se ha movido ya ha sido el Manchester City, que ya ha explicado su proyecto a Veiga y donde encajaría en el equipo de Guardiola. Además, sabe que en Inglaterra cobraría unos cinco millones de euros por temporada. Un salario superior al que percibiría en el Real Madrid. Por otro lado, el Nápoles sí se ha puesto en contacto con el Celta para informarles de su deseo de ficharle y para que el club gallego les eche una mano a la hora de convencer al futbolista, algo que no va a suceder.