Brahim Díaz da un primer mensaje en la pretemporada. El futbolista malagueño, internacional por Marruecos, está enchufado al máximo en los primeros días de entrenamiento con el Real Madrid. Esta debe ser la pretemporada de su vida, la que le permita llegar al máximo nivel al exigente curso futbolístico que tiene el conjunto blanco con hasta siete competiciones. Esa circunstancia jamás vista en el fútbol permite que jugadores como Brahim sean imprescindibles en la próxima temporada.
Y el futbolista está respondiendo con ganas, trabajo y compromiso en estos primeros días de entrenamiento. Además, Brahim Díaz se lleva el honor de marcar el primer gol de la pretemporada. El Real Madrid tendrá tres compromisos amistosos (ante Milan, Barcelona y Chelsea en Estados Unidos), pero este miércoles disputó un «partido de preparación» (así lo cataloga el Real Madrid, sin darle el calificativo de encuentro amistoso) ante el Albacete.
Y en ese duelo jugado en la Ciudad Deportiva de Valdebebas, Brahim marcó el primer gol de un Real Madrid que no fue como tal el primer equipo, ya que una parte la jugaron futbolistas entrenados por Carlo Ancelotti, pero la otra, la segunda mitad, la disputaron jugadores del Real Madrid Castilla de Raúl González (con Lunin en portería). El partido ante el Albacete, equipo de Segunda División, terminó 3-o con goles de Brahim, Latasa y Reinier.
De este encuentro (en el que en el equipo titular blanco aparecieron jugadores como Courtois, Lucas Vázquez, Vallejo, Fran García, Mario Martín, Ceballos o el propio Brahim), no se puede sacar ninguna conclusión. No era como tal un amistoso. Con una buena dosis de calor, ante esta ola de altas temperaturas que se viven estos días en Madrid, el equipo entrenado por Ancelotti se mezcló con el de Raúl.
Más allá de este duelo ante el Albacete, lo relevante en Brahim es cómo afronta una pretemporada clave para él. El año pasado ya hizo también este periodo previo a los encuentros oficiales al completo, pero esta vez lo hace en un contexto diferente: asentado en la plantilla, con la confianza de Carlo Ancelotti y con una competencia más amplía en el ataque por los fichajes de Endrick y Mbappé.
Sin JJ.OO. y pretemporada completa con el Real Madrid
El papel de Brahim este año, en el que se pueden llegar a jugar más de 70 partidos (más los que disputen con sus selecciones en los parones FIFA), es vital. La temporada pasada, el futbolista malagueño fue un buen revulsivo que además cuando Ancelotti le dio minutos, ya fuera desde el inicio o saliendo desde el banquillo, aprovechó esos momentos. Recordado es su gol en Leipzig que acabó siendo clave en uno de los momentos más difíciles que tuvo el campeón de Europa en esa temporada.
Todo ello en una pretemporada que no pudo ser tal para Brahim si el Real Madrid no hubiera impuesto su veto a sus jugadores para los Juegos Olímpicos. Y es que Brahim pudo ir perfectamente a la cita olímpica en París, cuyo torneo de fútbol arrancó ya este miércoles (dos días antes de la ceremonia de inauguración), ya que Marruecos le quería en su equipo.
La selección africana peleó hasta el final porque Brahim estuviera en el conjunto olímpico, que como tal es un equipo sub-23. El jugador del Real Madrid tiene ya 24 años, pero las reglas recogen que tres futbolistas mayores de 23 años pueden estar en la plantilla. Y Marruecos quería que uno fuera Brahim… pero el Real Madrid no le dejó, como a otros como Camavinga o Mbappé con Francia.
La prioridad del jugador y del club debe ser su preparación con el Real Madrid, el equipo en el que jugará toda la temporada. Y para ello estas semanas de julio y de agosto, a las órdenes de Antonio Pintus, es clave. Brahim es un jugador vital en la plantilla del Real Madrid en un año exigente, con siete títulos y una temporada que se alargará, como mínimo, hasta finales de junio de 2025, ya que el club blanco disputa el Mundial de Clubes en Estados Unidos. Si fuera avanzando eliminatorias e incluso llega a la final, la temporada durará hasta el 13 de julio.
Brahim Díaz sabe de esta circunstancia y está enchufado para este reto. Suyo fue el primer gol de la pretemporada, aunque fuera en un partido de «preparación», según el Real Madrid, y no amistoso. Todo cuenta para un jugador que ya el año pasado dejó una buena impresión y que quiere seguir escalando en el Real Madrid de Carlo Ancelotti.