El estadio Santiago Bernabéu mostró sus mejores galas para vivir la vuelta de las semifinales de la Champions que mide en el coliseo madridista a Real Madrid y Bayern. Si el recibimiento al autobús que trasladó a los jugadores al estadio fue espectacular, lo que se vivió dentro del coliseo madridista fue, simplemente, espectacular. La afición organizó un gran mosaico en el Bernabéu a la vez que sonaba el himno de la Décima.
Las gradas del Santiago Bernabéu se comenzaron a llenar incluso antes de que los jugadores del Real Madrid saltasen a calentar sobre el césped. Cuando Courtois, Kepa y Lunin saltaron al verde, se encontraron con una grada mucho más poblada de lo normal. Algo que se multiplicó cuando llegó el turno de los 10 jugadores de campo. Tras el recibimiento al autobús, los aficionados empezaron a abarrotar las gradas.
No obstante, el gran momento se vivió minutos antes de que ambos equipos saltasen al campo. El Bernabéu vibró con el himno de la Décima, la canción del madridismo, y, a continuación, se desplegó un mosaico espectacular 360º. En el fondo norte se pudo ver el primer escudo del Real Madrid junto con la fecha de 1902, cuando se creó el club, mientras que en el fondo sur lució el trofeo de la Champions y la siguiente frase: «El Real Madrid nunca se rinde». También se desplegarán varias lonas.
La imagen que se encontraron los jugadores cuando salgan al césped será impresionante. Porque sí, la grada en días como hoy también juega. La afición del Real Madrid ayudará a sus jugadores y presionará a los futbolistas del Bayern en cada acción. La eliminatoria está igualada, los de Ancelotti deben ganar para estar en final de la Champions y los más de 76.000 espectadores pondrán todo de su parte para conseguirlo.
Un gran día del madridismo
Antes de este espectacular recibimiento dentro del estadio, el madridismo dio el primer empujón a los jugadores del Real Madrid a eso de las 19:30 horas, cuando los hombres de Carlo Ancelotti hicieron acto de presencia en los alrededores del estadio Santiago Bernabéu. Miles de aficionados de la entidad blanca se congregaron en Concha Espina y en la Plaza de los Sagrados Corazones para alentar a los blancos. En cuánto el autobús del Real Madrid bajó por Concha Espina, miles de madridistas apoyaron a sus jugadores.
Desde las 18:30 horas, en los alrededores del estadio Santiago Bernabéu ya se respiró un grandísimo ambiente. El Real Madrid busca la final de la Champions contra el Bayern y la afición no ha querido dejar solo a un equipo que ganando sacara el billete para la final de Wembley que se celebrará el próximo 1 de junio.
Cuando el equipo hizo acto de presencia por Concha Espina, se encontró con miles de seguidores del Real Madrid que quisieron arropar a los blancos, incluso antes de que llegasen al estadio Santiago Bernabéu. Sin duda, este recibimiento al autobús del Real Madrid pasará a la historia de la entidad madridista.
Real Madrid y Bayern se enfrentan este miércoles en el Bernabéu en el gran clásico de Europa con un billete en juego por la final de la Champions que se jugará el próximo 1 de junio en el estadio de Wembley de Londres.