Que Gareth Bale hable en los medios ya es noticia, el galés no acostumbra a dar entrevistas, rehuye de los titulares y su mediatización. Pero es incuestionable que cuando lo hace, cuando habla, no deja indiferente a nadie. El británico, en declaraciones para el podcast The Hat-Trick, lanzó un anzuelo a su futuro, quizá hacia su destino. El 11 blanco dejó abierta de par en par la posibilidad de recalar en un futuro en la Major League Soccer (MLS), colocando clara su diana.
«Es una liga que está creciendo y que continúa su desarrollo. Son muchos los jugadores que quieren ir allí ahora. Definitivamente, es algo que me interesaría. Además, me encanta ir a Los Ángeles de vacaciones. Juego mucho al golf cuando voy allí», no se escondía Bale, que ve factible en el futuro dejar el Real Madrid para acabar su carrera futbolística en Estados Unidos, en Los Ángeles y allí ya sabemos quién es el rey: los Galaxy.
Gareth Bale es el Galáctico que necesita Los Angeles Galaxy para volver a colocar en primera plana al club. LA Galaxy es una franquicia titánica. Es con diferencia el club con mayor caudal económico de la competición americana, caracterizada siempre por tener entre sus filas a un jugador top. El club es propiedad de la empresa AEG (Anschutz Entertainment Group), fundada por el milmillonario Philip Anschutz, rey del espectáculo en América –es dueño del prestigioso festival Coachella, entre otros negocios–.
¿Y por qué necesitan a un galáctico como Gareth Bale? Pues muy sencillo: están huérfanos de ellos. El club angelino, desde su irrupción mediática en la esfera internacional pese a estar en una liga aún menor comparada con Europa, siempre se han caracterizado por tener entre sus filas a un jugador franquicia, un Galáctico de primer nivel en cualquiera de los sentidos. El primero fue David Beckham, el precursor del éxito de este club. Luego llegó un jugador del calado de Steven Gerrard tras una vida entera en Liverpool. Y por último el extravagante Zlatan Ibrahimovic. Son palabras mayores este trío.
Los Galaxy, tras bajar un par de escalones en su escala de Galácticos con Giovani dos Santos y Chicharito Hernández –este último aún sigue en el club–, busca a un jugador a la altura de los tres anteriormente mencionados, y Gareth Bale cumple cualquier expectativa que se pudieran imaginar. Encaja perfecto en esa idea para ser su nuevo jugador franquicia. El galés ya ha lanzando el anzuelo, ahora solo queda que Los Angeles Galaxy se sienten a hablar y recogerlo.
