El próximo mercado de fichajes será atípico. La crisis del coronavirus ha pinchado la burbuja creada en torno al fútbol y prever lo que va a suceder de aquí a un meses cuando se abra la ventana de transferencias es una incógnita. De lo que no cabe duda es que en el escaparate van a aparecer algunos chollos. Oportunidades de mercado quizá impensables hace semanas y que ahora se convierten en operaciones irrechazables. Una de ellas es la del jugador del Bayern David Alaba.
Alaba es un jugador que siempre ha gustado en el seno del Real Madrid y cuya incorporación se ha tanteado en diferentes ocasiones. Sin embargo, la gran oportunidad llega ahora: el jugador acaba contrato en 2021 y no quiere renovar con el Bayern para iniciar una nueva aventura fuera de Alemania. Quizá no es un jugador que la dirección deportiva madridista tuviese marcado en rojo para este mercado, pero la oportunidad es de oro: a sus 27 años es ahora o nunca.
Desde el Real Madrid sólo se vislumbran elementos positivos en la posible contratación. El primero de ello es la polivalencia de un jugador que puede desempeñarse como lateral izquierdo, como central y como centrocampista.
A día de hoy, el equipo blanco necesita un futbolista de nivel que pueda jugar de central junto a Varane y Ramos, ya que se entiende que a Militao aún le falta desarrollo. Además, Alaba también puede ocupar la demarcación de lateral izquierdo, que podría quedar coja si finalmente Marcelo opta por irse del Real Madrid tras perder el puesto de titular ante Mendy. El tercer hueco que podría rellenar perfectamente Alaba sería el de mediocentro donde jugó a la perfección con Guardiola como técnico del Bayern.
El segundo elemento es del precio. Su situación contractual unida a la crisis del coronavirus (el valor del jugador ha descendido 13 millones desde la pandemia) hacen que económicamente sea una operación muy factible. Su valor actual es de 52 kilos según el portal especializado Transfermarkt.
Salvado las distancias, la situación recuerda a la que propició la llegada de Kroos al equipo blanco en el verano de 2014. Si el austriaco sigue sin renovar con los bávaros, el Bayern se verá obligado a ponerlo en el mercado este verano si no quiere que se marche gratis un año después. Además, las relaciones entre clubes son buenas desde hace algunos años. De hecho se ha convertido en frecuente ver operaciones entre ambos. Robben, Xabi Alonso, Kroos, James u Odriozola son algunos ejemplos.
Si la polivalencia y el precio no fueran suficientes, hay otro factor que también empuja a que llevar a cabo la contratación: la experiencia. Desde muy joven Alaba ha sabido lidiar con la presión que implica el jugar en un club como el Bayern y la exigencia ser siempre favorito en la Bundesliga y la Champions League. Y eso es un valor añadido: 372 partidos le avalan. Además, también es el referente de la selección de Austria desde que debutase con 17 años y con los que ha jugado una Eurocopa, la del 2016.