El Real Madrid está muy cerca de fichar a Serge Ibaka (34 años y 2,08 metros). El club blanco negocia el regreso del ala-pívot para la próxima temporada y el acuerdo estaría a punto de cerrarse por un año. Viene como recambio de un Vincent Poirier que pondrá rumbo al Efes. Chus Mateo necesitaba un recambio en la pintura para suplir la marcha del francés y el elegido es un viejo conocido de la hinchada madridista.
Ibaka ya vistió la camiseta del Real Madrid en 2011 durante el lockout de la NBA y ahora podría regresar al WiZink Center para hacer una dupla fantástica con Edy Tavares, renovado recientemente por cinco años. De esta manera, el hispanocongoleño se convertirá en el tercer refuerzo del conjunto blanco para la próxima temporada, tras los fichajes de Xavier Rathan-Mayes y Andrés Feliz, una de las sensaciones de la Liga Endesa en la presente campaña.
El ex internacional español, que cumplirá 35 años el próximo mes de septiembre, al igual que el Real Madrid, se encuentra terminando su temporada en el Bayern de Múnich. Los de Pablo Laso están disputando la final de la Bundesliga donde han comenzado con victoria en el primer partido de la final, contra el Alba Berlín. No obstante, Ibaka no continuará en el conjunto bávaro al que llegó el pasado verano después de 14 temporadas en la NBA, formando parte, junto a Marc Gasol, de los históricos Toronto Raptors que ganaron el anillo en 2019.
Después de un año en el Bayern, donde ha promediado 12,6 puntos, 6,8 rebotes y 48% en triples, Ibaka volverá a España de la mano del Real Madrid con un acuerdo para una temporada, según ha publicado el portal web Encestando. Así, los blancos se reforzarían con uno de los mejores jugadores de Europa en la pintura. Además, Serge no ocupa plaza de extracomunitario, ya que fue nacionalizado español. De hecho, el ala-pívot fue oro en el Eurobasket 2011 y plata en los Juegos de Londres 2012 donde España cayó contra Estados Unidos en la final.
Mientras tanto, el equipo de Chus Mateo está concentrado en la final de la Liga Endesa, donde no ha podido empezar mejor ante un combativo UCAM Murcia. El Real Madrid no dio pie a la sorpresa y se impuso por 84-76 en el primer partido de la final disputado el pasado sábado en el WiZink Center. Los de Sito Alonso habían ganado todos los partidos que han disputado fuera de casa en este playoff (dos a Valencia y tres a Unicaja), pero los blancos no dieron opción gracias a Musa y Campazzo, que sofocaron la rebelión de los murcianos.
El club está ya trabajando en la próxima temporada, pero lo primero es cerrar la campaña en lo deportivo y una vez termine la Liga Endesa comenzarán a producirse los anuncios de las nuevas incorporaciones. El equipo se ha repuesto a las mil maravillas del palo de la derrota en Euroliga y lo hizo arrasando en las semifinales contra el eterno rival, el Barcelona, al que derrotó por 3-0. Ahora quieren culminar con el título de Liga Endesa para poner el colofón a una gran temporada.