El Real Madrid ha igualado al Barcelona en lo más alto de la Euroliga después de una jornada redonda para sus intereses. Empezó con la derrota del equipo azulgrana en campo del Unics Kazan (70-64) y continuó con su sólida victoria en campo del Alba Berlin (74-89). El equipo blanco cuenta las mismas victorias que su eterno rival, ambos 16, pero ha disputado dos partidos menos, así que tiene a mano el liderato en solitario por primera vez este curso. Además, celebró el retorno de Gaby Deck.
Desde su derrota en el último Clásico continental, el Real Madrid no ha vuelto a tropezar, una racha de diez victorias seguidas que pondrá a prueba contra el Barcelona, su próximo rival el domingo en la Liga Endesa. Ha navegado con matrícula de honor la marejada del Covid -Rudy Fernández es el único que sigue contagiado- y aspira a la revancha ante un Barça que atraviesa un momento opuesto, con cuatro derrotas en cinco partidos.
En el Mercedez-Benz Arena espera el antepenúltimo clasificado de la Euroliga y el partido transcurrió según el guión previsto, con un visitante superior de la mano de Thomas Heurtel (17 puntos) y Vincent Poirier (13), sus mejores hombres en el pabellón germano.
El equilibrio solo se mantuvo durante el primer cuarto, con el animoso Alba agarrado a Maodo Lo (21 puntos) puntos, el mejor con diferencia en la plantilla dirigida por el técnico español Israel González. Su mayor ventaja en toda la noche fue de tres puntos (11-8) , pero poco le duró la alegría porque el Real Madrid apretó el acelerador y se escapó con un parcial de 2-17 entre el final del cuarto inicial y el inicio del segundo (15-27). Su dominio seguía inalterado al descanso (33-48).
Vuelve Deck
El club berlinés protagonizó un arreón tras el descanso que le llegó a colocar a seis puntos (46-52), pero no le dio para más mientras su rival activaba a las torres francesas Poirier y Yabusele. Para entonces ya había vuelto a debutar Deck, que jugó 9 minutos y aportó 2 puntos. Días llegarán en los que el argentino tendrá que ser tan importante como antaño.
El equipo blanco le dio el último sopapo al partido en el último parcial, cuando emergió la figura de Heurtel. La voracidad anotadora del base impulsó a su equipo a una renta de 23 puntos (60-83, min.35) y convirtió los minutos finales en un trámite. El broche perfecto antes de buscar venganza contra el Barcelona en el WiZink Center.
