Keanu Reeves no sólo es uno de los actores más queridos de Hollywood, sino que también es un verdadero apasionado de los coches y de las motocicletas. Su amor por los automóviles y motocicletas no es un secreto, y a lo largo de los años ha acumulado una colección de vehículos impresionante, con piezas icónicas que reflejan su personalidad: sobria, elegante y con un toque de rebeldía. Desde deportivos de lujo hasta motocicletas personalizadas, su garaje es digno de envidia. Pero, ¿qué hace que estos vehículos sean tan especiales? Te lo contamos a continuación.
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El inicio: un Volvo Amazon 122 con historia
Todos tenemos un primer coche, y el de Keanu Reeves no podía ser más auténtico. En sus primeros años en la industria del cine, antes de alcanzar la fama mundial, Reeves conducía un modesto pero encantador Volvo Amazon 122 de color verde. A pesar de que el estado del coche dejaba mucho que desear (se dice que tenía los asientos rotos y los sostenía con ladrillos), este automóvil representó su primer gran viaje hacia el estrellato. Fue con él con el que realizó un viaje desde Toronto hasta Los Ángeles, un trayecto que, sin saberlo, marcaría el inicio de su exitosa carrera en Hollywood.

Porsche 911 Carrera 4S (Tipo 993): la joya de los 90
Cuando el éxito llegó a su vida tras películas como Point Break y Speed, Reeves decidió darse un capricho y adquirió uno de los coches más deseados de los años 90: un Porsche 911 Carrera 4S Tipo 993. Este modelo es altamente valorado por los coleccionistas, ya que fue el último 911 refrigerado por aire, lo que le otorga un carácter especial dentro de la saga Porsche. Además, su color negro y su diseño elegante encajan a la perfección con la personalidad discreta pero sofisticada del actor.

Bugatti Veyron: pura velocidad y exclusividad
Keanu no sólo aprecia los deportivos clásicos, sino también los hiperdeportivos de última generación. Uno de los modelos más impresionantes de su colección es un Bugatti Veyron, un coche que en su momento ostentaba el título de automóvil de producción más rápido del mundo. Este bólido, con su motor W16 de 8.0 litros y una potencia de 1.100 caballos de fuerza, puede alcanzar velocidades de hasta 410 km/h. ¿Su precio? Aproximadamente 3 millones de dólares, una cifra que sólo unos pocos afortunados pueden permitirse.

Las motos: su verdadera pasión
Aunque sus coches son impresionantes, el amor de Keanu por las motos es aún mayor. Su primera gran adquisición en este ámbito fue una Norton Commando de 1973, una moto clásica que todavía conserva. Con los años, su pasión lo llevó a fundar Arch Motorcycle Company, una empresa especializada en motos personalizadas de alto rendimiento. Junto a sus socios, Reeves ayudó a diseñar la Arch KRGT-1, un modelo que combina lo mejor del estilo retro con tecnología moderna.

Amante del motor
A diferencia de otros famosos que compran vehículos solo por estatus, Keanu Reeves realmente disfruta de la conducción. Se le ha visto recorriendo carreteras en sus motocicletas, disfrutando de la velocidad de su Porsche o simplemente compartiendo su pasión con otros entusiastas del motor. Su colección es un reflejo de su personalidad: clásica, elegante y con un toque de rebeldía.
Si algo queda claro es que, tanto en la gran pantalla como sobre ruedas, Keanu Reeves siempre se mantiene fiel a sí mismo. ¿Cuál de sus coches o motos te gustaría tener en tu garaje?
