Madrid tiene opciones de restaurantes tanto para quienes se quedan en la capital como para los que la eligen como destino en estas fechas de Semana Santa. Templos de producto, terrazas con las que disfrutar del arranque de la primavera, proyectos con más de un siglo de historia, restaurantes temáticos o cenas con espectáculo son las responsables de convertir a Madrid en un destino imprescindible durante estos días, ¿te animas?
Carbón
📍 Calle Juan Bravo, 37.
Por último, si estás en Madrid esta Semana Santa tienes que irte hasta el corazón del barrio de Salamanca para conocer Carbón, antiguo Carbón Negro, y un impresionante restaurante conocido por su arte para dominar el fuego. La magia que desprende su cocina, la calidad de su materia prima y los procesos utilizados para cada una de sus elaboraciones se reflejan a la perfección en la pureza de su propuesta gastronómica.
Su carta destaca por sus verduras, con platos como los pimientos de Lodosa a la brasa confitados o el puerro de temporada asado en la parrilla con salsa romesco; carnes como el pollo picantón de caserío asado al carbón o la hamburguesa de picanha madurada y ternera asada a la brasa; y pescados como el rape de tripa negra a la brasa o el rodaballo a la parrilla con su bilbaína, todos ellos pasados por sus brasas.
Y, para aquellos que quieran disfrutar de una forma más privada, el local dispone de dos exclusivos reservados, La Chimenea y Clandestino.
Arzábal Retiro
📍 Avenida Menéndez Pelayo, 13.
Si estás en Semana Santa en Madrid tienes que conocer Arzábal Retiro, el restaurante en el que Iván Morales y Álvaro Castellanos reinterpretan a su manera la cocina tradicional a través del mejor producto, se presenta como una opción ideal para disfrutar de una propuesta gastronómica y enológica de máximo nivel.
En la carta del restaurante destacan elaboraciones con el mejor producto del mar, como la sopa bullabesa con mariscos y pescados de roca, berberechos, dados de lubina y mejillones de roca o la lubina de anzuelo a la parrilla con espárragos trigueros y unos tirabeques con pil pil; otras propuestas imprescindibles son los guisantes encebollados y tirabeques salteados con guanciale crujiente y yema de huevo o platos de cuchara tan clásicos de la cocina arzabalera como la cazuelita de callos a la madrileña o las patatas a la importancia con cigalas.
Además, en su bodega destacan más de 700 referencias de vinos nacionales e internacionales, espumosos, champagnes y dulces que también están disponibles por copas.
Abrasa
📍 Plaza de la Moraleja, C. de la Estafeta, 2. Alcobendas.
Abrasa es un homenaje a la parrilla, un asador contemporáneo donde el cariño hacia el producto de calidad cobra fuerza. El buen hacer, el carbón vegetal y tres parrillas niveladas se encargarán de lograr una parrillada única y cautivante. Así, la propuesta de Abrasa está protagonizada por producto de primera calidad para lograr los mejores platos. Todo ello en un espacio con un acogedor ambiente en el que la atención a los detalles y el buen servicio prima en cada mesa.
Barracuda MX
📍 Calle de Valenzuela, 7.
Con una ubicación privilegiada junto a la Puerta de Alcalá, Barracuda MX es el proyecto más personal de Roberto Ruiz. Un viaje a través de los casi 8.000 kilómetros del litoral Pacífico mexicano de norte a sur: desde Ensenada y Baja California hasta Chiapas, territorios donde históricamente había muchas rutas comerciales y que llevaron al mestizaje con Asia.
El resultado es una cocina ligera, fácil de entender y muy disfrutable, donde tienen cabida técnicas tan particulares como los pescados zarandeados o a la talla. La propuesta gastronómica de Barracuda MX es fresca, joven, accesible, y se desarrolla en un espacio diferente, pensado para hacer sentir el Pacífico y acercar un pedacito de México.
El estudio de interiorismo Cousi se encarga de firmar este proyecto, presidido por una gran barra central y con tres ambientes diferentes para adaptarse a cada tipo de encuentro.
Cadaqués
📍 Calle Jorge Juan, 35.
Influido por el viento de tramontana y el mito de la mágica población de Girona, Cadaqués propone una inmersión gastronómica en la tradición milenaria de la cocina mediterránea. Mar, montaña y huerta se funden en un nuevo espacio que apuesta por las recetas tradicionales, los productos de proximidad y un formato rompedor.
Arroces cocinados en la parrilla a fuego vivo, productos de la huerta mediterránea, carnes de proximidad y pescados de la lonja, preparados al momento por los cocineros y con una carta que se adapta a los productos de temporada.
