VLF Force One: el Viper se viste de gala
El mercado estadounidense es el primer destino de las exportaciones españolas, después de la UE.
Si miras con atención el perfil de este VLF Force One, verás unas salidas de escape laterales que seguramente te suenen bastante. Son las del mítico Dodge Viper. Y es que, aunque no lo parezca, este coche se basa en el deportivo americano, si bien la única parte reconocible es ésta que te acabamos de comentar.
El VLF Force One ha sido una de las grandes estrellas del Salón de Detroit 2016. A pesar de no venir de ninguna marca de renombre, estamos ante un coche cuya espectacularidad puede con todo. Los responsables de su creación son los chicos de VLF Automotive, una compañía independiente que ha modificado el Dodge Viper hasta la saciedad. Por ejemplo, nos encontramos con un frontal de nueva factura que dispone de varias entradas de aire directas al motor. Incluso su parrilla delantera nos puede llegar a recordar a la de los Maserati.
Otros de los puntos que han cambiado en el VLF Force One los encontramos en los faros, que incorporan pilotos con tecnología LED. Se añade también un nuevo splitter delantero, así como un agresivo difusor de aire en la zaga, entre otros detalles aerodinámicos.
No obstante, nuestra mayor exclamación de admiración la vamos a soltar cuando abramos el capó. Aquí aparece el espectacular V10 de 8,4 litros que equipa el deportivo americano. Como no podía ser de otra forma, VLF Automotive ha retocado la mecánica hasta la saciedad para llegar a ofrecer 745 CV de potencia, 100 más que la versión convencional. Este motor se asocia a una caja de cambios manual de seis velocidades de serie, aunque como opción se puede incorporar una transmisión automática con el mismo número de relaciones. Esta última posibilidad añade además unas levas tras el volante con las que controlar el cambio de forma secuencial.
Como podréis imaginar, con semejante torrente de fuerza situado bajo el motor, las prestaciones son de infarto. Se asegura una aceleración de 0 a 100 km/h de unos 3 segundos y una velocidad punta que ronda los 350 km/h.
¿Tiene alguna pega este coche? Sí, dos, que además suelen ser las habituales en este tipo de deportivos. En primer lugar, será un vehículo tremendamente exclusivo, ya que solamente se van a fabricar 50 unidades. Y en segundo, solo unos pocos afortunados podrán permitírselo. Su precio, al cambio, ronda los 250.000 euros.