Primera toma de contacto con el nuevo Ford Fiesta, una joya en todos los sentidos

Hace unos meses tuve mi primer contacto con la nueva generación del Ford Fiesta. Fue en Madrid, con una unidad vestida con su traje más lujoso, el Vignale, pero sin poder ‘catarlo’. Eso sí, fue un primer vistazo en el que ya pude constatar que la nueva generación de uno de los vehículos con más historia del mundo de la automoción había dado un poderoso salto hacia adelante. Y eso es precisamente lo que he corroborado en una visita a Córdoba donde me he puesto por primera vez al volante de este vehículo. Puedo afirmar sin dudar que estamos ante uno de los utilitarios más completos y de más calidad de la historia, y las razones son varias.
El nuevo Ford Fiesta son realmente varios coches en uno. Por un lado tendremos el Fiesta convencional, que viene marcado por un acabado Trend que resulta de lo más completo. De hecho, su equipamiento de serie ya le hace obtener, por ejemplo, las 5 estrellas Euro NCAP, ese organismo independiente que analiza la seguridad de los vehículos. Para los que quieran más lujo, tenemos el Fiesta Vignale, que hará que nuestra vida a bordo sea una experiencia que admite poca comparación dentro del segmento. Los más deportivos tendrán a su disposición el acabado ST-Line, que disfraza al Fiesta de ‘chico malo’, y el Fiesta ST, que llegará en 2018 con todo el buen hacer de la marca del óvalo en lo que a vehículos de altas prestaciones se refiere y con un nuevo motor tricilíndrico de 1,5 litros y 200 CV -reconozco que tengo realmente curiosidad por echarle el guante-. También en 2018 será el turno de los que busquen la opción más aventurera, un Fiesta Active que toma la forma de SUV compacto, aunque sin añadir excesivas capacidades off-road y con un maletero cuya capacidad no difiere según nos contaron de la variante de 5 puertas -303 litros, mientras que la de 3 puertas ofrece 292-.
Durante esta primera toma de contacto he podido ponerme al volante de dos unidades diferentes, una con el acabado Vignale y otra con el ST-Line, ambas dotadas del motor de gasolina 1.0 EcoBoost de 140 CV. Se trata de la opción más poderosa de la gama hasta que llegue el Fiesta ST. Con una ruta, especialmente el primer día, donde la carretera estaba hecha para sacarle los colores a cualquier motor, el propulsor de la marca americana se defendió más que bien. Es realmente impresionante el trabajo de Ford con este EcoBoost de tres cilindros. Los más veteranos del lugar nunca hubiesen apostado porque una mecánica de estas características funcionase como lo hace. El motor corre en todo su rango, y todo ello sin consumir demasiado. Conduciendo de una forma eficiente es fácil ver un gasto medio inferior a los 6 l/100 km. Si lo hacemos de una forma más dinámica, no pasará de 7,5. Muy buenas cifras que, obviamente, mejoran en la opción diesel, que es un 1.5 TDCi en dos niveles de potencia, 85 y 120 CV. Además, el motor EcoBoost se ofrecerá en versiones de 100 -puede llevar cambio automático, el resto de versiones serán manuales- y 120 CV, quedando como la variante de acceso otro propulsor de gasolina, el Ti-VCT de 70 CV. Consejo, si queréis gasolina, optad por un EcoBoost. Sin duda. Y no por dudar del pequeño propulsor que ofrece Ford de primeras, sino por lo bien que funcionan estos tricilíndricos.
Nuevo Ford Fiesta, una vida a bordo de lujo
Motor aparte, la vida a bordo del nuevo Ford Fiesta es un auténtico lujo. El aumento de dimensiones del coche se nota en cada una de sus cinco plazas. Además, desde cada una de ellas veremos un más que interesante avance tanto en los materiales como en los acabados dispuestos. Como te decía antes, he podido comprobar de primera mano lo que ofrecen los acabados Vignale y ST-Line, y os aseguro que, si obviamos el anagrama de Ford, podemos pensar perfectamente que estamos ante un vehículo de los llamados ‘premium’.
El nuevo Ford Fiesta es además el primero de la marca en ofrecer, como opción, un sistema de sonido B&O Play. Con sus 675 watios de potencia, os garantizo que disfrutaréis de la música como pocas veces lo habéis hecho en un vehículo del segmento B. Además, contaremos con el sistema de comunicaciones y entretenimiento SYNC 3, que cuenta con el apoyo de pantallas táctiles flotantes de alta definición de hasta 8 pulgadas. Por su parte, la considerable reducción de botones analógicos en el interior hace de la imagen de éste mucho más actual y de calidad.
La tecnología será otro de los referentes del nuevo Fiesta, entre las que destacan sistemas como el detector de peatones, capaz de detectar a 130 metros por delante del coche y, por primera vez, ayudar a prevenir colisiones de noche, o el primer sistema Active Park Assist de Ford que puede activar el freno para prevenir colisiones a baja velocidad cuando se estaciona en modo manos libres.
En definitiva, con el nuevo Ford Fiesta -cuyo exterior, por cierto, ofrece hasta 29 variantes diferentes de colores entre carrocería, techo y carcasas de los retrovisores- tenemos ante nosotros una de las opciones a tener en cuenta de forma obligatoria si estamos buscando un coche del segmento B. Ya lo tenemos a la venta, encontrándose las versiones disponibles entre 15.045 y 21.995 euros.






