Soy mecánico y ésta es la razón por la que debes dar un golpe al capó del coche antes de arrancarlo en invierno
Con la llegada del frío y las bajas temperaturas, los gatos callejeros buscan lugares cálidos donde refugiarse, razón por la cual las autoridades alertan sobre la importancia de golpear el capó antes de arrancar el motor. Se trata de un gesto muy sencillo que puede salvar vidas y evitar daños en el propio vehículo. «Un gato atrapado puede quedar enganchado en la correa del alternador o en los ventiladores del motor. Además del sufrimiento del animal, el impacto puede causar desperfectos considerables en el turismo», explican los mecánicos.
Cuando el coche se detiene y el motor aún conserva temperatura, los animales se refugian en los bajos o incluso dentro del compartimento del motor, donde encuentran un calor residual que les ayuda a sobrellevar las noches frías. No es un comportamiento extraño, sino puro instinto de supervivencia. A menudo, los gatos callejeros se acurrucan sobre una rueda o justo encima del bloque del motor; un escondite que puede convertirse en una trampa mortal cuando el conductor, sin saberlo, arranca el vehículo al día siguiente.
Golpea el capó antes de arrancar
@guau_cat Cuando bajan las temperaturas, muchos gatos callejeros buscan refugio en el calor de los motores o entre las ruedas de los coches Un simple gesto puede marcar la diferencia: 🚗 Da un par de golpecitos al capó antes de arrancar. 🚙 Haz sonar el pitido del coche. Cuidemos a los gatetes con un simple gesto🐱 #guaucat #guauandcat #concienciaanimal #cuidadoanimal #gatoscallejeros ♬ sonido original – Guau&Cat | Comida natural 🐶🐱
Los veterinarios y asociaciones protectoras de animales advierten cada año de esta situación: un simple descuido puede tener consecuencias fatales. En el mejor de los casos, el gato saldrá corriendo al oír el motor. En el peor, puede sufrir lesiones graves o morir atrapado entre las piezas del coche. El consejo es claro: si tras unos golpes suaves el gato no aparece, hay que esperar unos segundos y hacer algo de ruido: golpear un poco más fuerte, cerrar las puertas o tocar el claxon.
Si, aun así, el animal no se mueve o sigue maullando desde el interior, lo más probable es que esté atrapado. En ese caso, lo mejor es actuar con calma y tratar de ayudarle a salir. En caso de duda, lo más prudente es llamar al 112 o a una protectora local.
Una vez que el gato haya salido, es importante comprobar si presenta heridas visibles, cojea o parece asustado. Si el animal se deja tocar, lo ideal es llevarlo a una clínica veterinaria para una revisión. Muchas veces, los felinos pueden sufrir cortes o contusiones sin mostrar dolor inmediato.
«Un examen rápido puede detectar lesiones internas o hipotermia. Además, si el gato no tiene microchip, se puede notificar a una protectora para valorar su adopción o su devolución al entorno controlado».
Elementos en el vehículo
Durante los meses más fríos del año, además de revisar el estado general del vehículo, es importante llevar a mano una serie de accesorios y elementos de emergencia que pueden ser de gran ayuda en caso de imprevistos. Uno de ello es la rasqueta para eliminar el hielo del parabrisas. También resulta muy útil contar con un spray descongelante, que actúa rápidamente sobre el cristal.
Los cables de arranque o un arrancador portátil son imprescindibles en esta época del año, ya que las bajas temperaturas afectan al rendimiento de las baterías. También conviene llevar un kit de primeros auxilios, además de agua y algo de comida no perecedera, especialmente en trayectos largos.
Consejos para conducir en invierno
«En carretera o en los trayectos diarios, es fundamental que nuestro vehículo esté preparado para enfrentarse a situaciones de menor adherencia y visibilidad, garantizando así desplazamientos seguros y sin contratiempos. Durante el invierno, las condiciones climatológicas suelen ser más adversas que en los meses cálidos: la lluvia, el viento, el hielo o la nieve son frecuentes en muchos trayectos, siempre sobre un asfalto frío que reduce la capacidad de agarre de los neumáticos. A esto se suma la disminución de las horas de luz diurna, lo que complica aún más la visibilidad al volante. Por ello, el coche debe estar siempre a punto, especialmente si se circula por zonas frías o se planea viajar, revisando aspectos esenciales como los neumáticos, suspensiones, niveles, limpiaparabrisas, luces, sistema de frenos, climatización, batería y dirección.
Además, si el vehículo no cuenta con neumáticos específicos de invierno o de todo tiempo (all seasons), es imprescindible llevar siempre cadenas en el maletero. También conviene hacer espacio para otros elementos que pueden resultar de gran ayuda en caso de quedar atrapado por una tormenta de nieve. Junto a los triángulos de emergencia, el chaleco reflectante, la rueda de repuesto y las lámparas de recambio, es recomendable incluir fusibles de repuesto, herramientas, pinzas para la batería, guantes e incluso una manta. Estos pequeños detalles pueden marcar la diferencia entre un incidente menor y una situación complicada en carretera», recuerda la DGT.
