La DGT está quitando el carnet de conducir a todas las personas que tomen los medicamentos de la lista
La seguridad vial es una preocupación constante para las autoridades en todo el mundo, y España no es la excepción. Cada día, millones de conductores circulan por las carreteras del país, y garantizar que lo hagan de forma segura es esencial para prevenir accidentes. Con este objetivo en mente, la DGT ha anunciado que, a partir de 2025, habrá nuevas regulaciones que afectarán la renovación del carnet de conducir de aquellas personas que consuman ciertos medicamentos o padezcan enfermedades que puedan poner en riesgo su capacidad para conducir.
En la actualidad, existen una serie de controles médicos obligatorios que los conductores deben superar para poder renovar su carnet. A lo largo de los años, la DGT ha ido actualizando sus criterios en función de los avances médicos y de la investigación sobre cómo las diversas condiciones de salud afectan la capacidad para conducir. De esta forma, no sólo se tiene en cuenta el estado físico de los conductores, sino también su salud mental y emocional. La principal novedad es que, a partir del próximo año, ciertos medicamentos específicos podrán ser motivo suficiente para que no se autorice la renovación.
La DGT no te renovará el carnet de conducir si tomas alguno de estos medicamentos
La lista de medicamentos que, según la DGT, afectarán la posibilidad de renovar el carnet de conducción incluye algunos tratamientos muy comunes.
El primero de estos medicamentos son los utilizados para el tratamiento de la diabetes, en especial la insulina. Aunque la diabetes es una condición ampliamente controlada por la medicina moderna, el uso de insulina puede generar efectos secundarios que afectan el estado de alerta del conductor.
La hipoglucemia, un descenso en los niveles de azúcar en la sangre, es una posible complicación para quienes utilizan insulina, y esta puede causar desorientación, somnolencia e incluso pérdida de conciencia temporal. Por esta razón, la DGT ha decidido que los conductores que dependan de este tipo de medicamentos deberán presentar un informe médico favorable.
Otro grupo de medicamentos que entra en esta categoría son los fármacos psiquiátricos. Los trastornos mentales, como la ansiedad, la depresión y otros trastornos psiquiátricos, son cada vez más comunes en la sociedad actual, y muchos pacientes reciben tratamiento con medicamentos que pueden alterar sus capacidades cognitivas y motoras.
La DGT ha especificado que aquellos conductores que estén bajo tratamiento con fármacos ansiolíticos, antidepresivos o antipsicóticos, entre otros, no podrán renovar su permiso de conducción sin un informe médico que acredite que el tratamiento no pone en riesgo su seguridad al volante.
Además, los medicamentos utilizados para tratar la apnea del sueño también estarán bajo revisión por parte de la DGT. La apnea del sueño es un trastorno que interrumpe el descanso nocturno y, si no se trata adecuadamente, puede afectar gravemente el rendimiento diurno, incluyendo la capacidad para conducir. Los conductores que reciban tratamiento para esta afección deberán presentar un informe médico que confirme que su tratamiento es efectivo.
Enfermedades que impiden la renovación del carnet de conducir
Entre las enfermedades respiratorias, destaca la apnea del sueño, pero también se incluyen trastornos respiratorios graves que pueden generar fatiga y dificultad para respirar. En estos casos, la renovación del permiso solo será posible si el conductor ha seguido un tratamiento adecuado y cuenta con un informe médico que garantice que su estado de salud es apto para conducir. Para los casos más graves, como la disnea permanente en reposo, la DGT prohíbe directamente la renovación del carnet de conducir debido al riesgo de desmayos o pérdida de conciencia durante la conducción.
Las enfermedades neurológicas también son una de las principales preocupaciones para la DGT, ya que pueden tener un impacto directo en las habilidades cognitivas y motoras del conductor. Condiciones como la epilepsia, que puede provocar pérdidas de conciencia repentinas, y los accidentes cerebrovasculares, que a menudo resultan en dificultades motoras o cognitivas, son algunas de las que pueden impedir la renovación del permiso de conducción. En estos casos, la DGT exige que el conductor presente un informe médico detallado que demuestre que ha tenido un periodo de estabilidad.
Las enfermedades cardíacas son otra categoría de afecciones que pueden impedir la renovación del carnet de conducir. Las arritmias, infartos previos y el uso de marcapasos o desfibriladores son algunas de las condiciones que la DGT considera incapacitantes para conducir. Estas enfermedades pueden provocar episodios de desmayo o falta de coordinación, lo que representa un riesgo para la seguridad vial. En estos casos, los conductores deberán presentar un informe médico que certifique que su condición está controlada.
Las enfermedades psiquiátricas, que incluyen trastornos como la depresión, la ansiedad, el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC), el trastorno de déficit de atención e hiperactividad (TDAH) y la demencia, también son un factor importante que afecta la capacidad de conducción. La DGT reconoce que los trastornos psiquiátricos, especialmente en personas mayores, pueden aumentar significativamente el riesgo de accidentes.