Adiós a tu carnet de conducir: la lista de enfermedades con las que no podrás obtener ni renovar el permiso

La DGT lo que ha hecho ha sido actualizar los periodos para la vigencia del permiso de conducir, con una regulación que va a terminar afectando a los mayores de 65 años. Todo ello señaló las patologías que pueden terminar haciendo que se impida la obtención o renovación del permiso de circulación con un automóvil dentro del país.

En España no hay límites de edad para continuar conduciendo, aunque desde los 65 se aumentará la periodicidad en cuanto a la que se deben producir las renovaciones del permiso.

Así es como los periodos para la vigencia de estos permisos van a ser: cada cinco años para automóviles, motos y motocicletas, así como licencias de conducción. Cada tres años para los permisos profesionales de autobuses y camiones.

Una medida necesaria

Todo ello es debido por la «alta tasa de mortalidad en accidentes viales entre este grupo etario», ha dicho María José Aparicio, que es representante de la Educación y la Formación Vial de la Dirección General de Tráfico. En dicha línea, un 30% de los fallecidos por accidentes de tráfico en la U.E. pertenecen al grupo mayor de 65 años.

Estado de salud

Entre las condiciones que pide la DGT para la obtención o renovación del carné de conducir, es encontrarse con un buen estado de salud. Por este motivo, los conductores deberán superar un reconocimiento médico que estará basado en una serie de pruebas médicas y psicotécnicas.

Para los que deseen la renovación del carnet, dichas pruebas se deben hacer en un Centro para el Reconocimiento de Conductores homologado, y antes de que se vaya a caducar el permiso, puesto que si caduca puede haber multas por valor de doscientos euros.

Así es como el centro médico va a certificar que el conductor que se encuentre interesado en renovar el documento va a estar en buenas condiciones físicas y psíquicas óptimas para poder ponerse al volante de un coche.

Enfermedades incompatibles

Para limitar al máximo los accidentes que se producen en las vías, la DGT ha terminado haciendo una lista con las enfermedades o las patologías incompatibles que se deben valorar cuando hay que conducir un automóvil.

Por todo ello, quienes sufren este tipo de enfermedades, no van a poder sacárselo o proceder a renovarlo, salvo que tengan un informe médico que vaya a certificar la aptitud para conducir.

Enfermedades mentales y demencia

La publicación de tráfico dice que hay varios estudios científicos que lo que hacen es demostrar que cuando los conductores tienen algunas de las patologías catalogadas por la DGT, cuentan con más posibilidades de tener un accidente.

En especial a la DGT le preocupan este tipo de patologías porque las sufren los conductores de avanzada edad.

Evaluación médica periódica y multas

Algo que conviene tener en cuenta es que el diagnóstico de una patología no va a suponer que el conductor ya no pueda volver a conducir.  Este documento dice que «dependerá de la evolución de la enfermedad y de la condición física del paciente».

Todo esto hace que se tenga que evaluar periódicamente, lo mismo que otros conductores, pero de forma más habitual. No olvidemos que si tiene una revisión médica negativa y sigue conduciendo, el conductor afrontará unas multas que pueden ser de hasta 6.000 euros.

Otras patologías

Cuando hablamos de las enfermedades de carácter respiratorias que limitan la capacidad para poder conducir, se puede hablar de que la DGT incluyó la apnea del sueño y la disnea permanente en reposo o un esfuerzo leve.

Dicha última dolencia no va a permitir al conductor que renueve el permiso de conducir, ha señalado el documento.

Hay otras enfermedades como el trasplante de riñón o la nefropatía con diálisis que precisan de un seguimiento especial por parte del conductor. La perdida de la conciencia es incompatible con conducir, y van a ser de vigilancia especial la epilepsia y el accidente transitorio de carácter isquémico.

Más enfermedades

• Vasculares, como los aneurismas, trastornos oncohemáticos y dolencias oncológicas.
• Paratiroides, pacientes con diabetes que dependen de la insulina, también cuentan con limitaciones para la renovación del carné dependiendo del estado de la enfermedad. Otras patologías como los infartos, arritmias y los pacientes con prótesis de válvulas o los famosos desfibriladores automáticos tendrán que contar con especial vigilancia de cara a la renovación del permiso de conducir.

Otras dolencias que impiden conducir un automóvil

Si hablamos de las patologías psiquiátricas, el conductor no podrá conducir ninguna clase de vehículo si sufre demencia, trastorno de ansiedad, personalidad, los trastornos del sueño, depresión, TDH, TOC, o el ser drogodependiente o alcohólico.

De la misma forma hay otras dolencias con conducir como el Alzheimer, la ELA, distrofias, Parkinson, Osteoporosis, etc.