El cabreo de Ricky de ‘OT’ tras saber que sus compañeros serán pregoneros del Orgullo

Ricky Merino la vuelve a liar en Twitter. Después de que tras su salida de la academia protagonizase un entuerto con el marido de la mismísima Mónica Naranjo en la red social, el concursante de ‘OT’ ha vuelto a hacer de las suyas tras conocer una inesperada noticia. Con motivo de las fiestas del Orgullo, el comité que organiza esta fiesta ha querido nombrar a Agoney y a Marina -ambos participantes de ‘OT’ 2017- como pregoneros, una responsabilidad que cada año recae en personalidades del espectáculo, los medios de comunicación o la política que contribuyen en la visibilidad de la diversidad LGTBI.

Tras conocer esta noticia, el mallorquín no ha dudado en lanzar una ‘pullita’ a aquellos que parecen haberse olvidado de él a la hora de realizar esta tarea. Una reacción que ha tenido bastante repercusión en las redes sociales. «Una cosa. Sabéis que soy maricón, ¿no?», decía el triunfito a través de la aplicación del colibrí azul. Esta contundente afirmación ha sido muy aplaudida entre sus seguidores, que consideran «injusto» que Ricky haya sido excluido entre sus compañeros a la hora de tener el honor de participar en las fiestas del Orgullo.

Una cosa. Sabéis que soy maricón, ¿no?

— Ricky Merino (@Ricky_ot2017) 19 de junio de 2018

‘OT’ 2017: La edición de la visibilidad

Era de esperar que en las fiestas del Orgullo en Madrid los chicos de ‘OT’ 2017 tuvieran alguna presencia, y es que la última edición del talent ha contado con una enorme visibilidad en lo que respecta a la diversidad sexual. Por un lado los Javis -que también darán el pregón de este año- han reflejado la normalidad de una pareja gay consiguiendo despertar la ternura del gran público, y por otro, Marina y Agoney. La primera sorprendió a muchos cuando dio a conocer que su novio Bast es un chico transexual, mientras que Agoney quiso revelar su homosexualidad estando dentro de la academia más famosa de España. Gestos como estos han convertido a esta edición en todo un espejo televisivo en el que millones de jóvenes se han visto reflejados. Un reducto de libertad y visibilidad que se ha convertido en un fenómeno de masas.