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Así celebra Inés Arrimadas el amor por su marido, Xavier Cima

El ‘regalo de Navidad’ adelantado del marido de Inés Arrimadas

La pasión ‘enterrada’ de Inés Arrimadas

Inés Arrimadas
EN IMÁGENES | La vida de Inés Arrimadas detrás de la política / Gtres
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Casada desde el pasado 1 de agosto de 2016, el de Inés Arrimadas (36) y el ex diputado de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) Xavier Cima (40), es un amor que continúa viento en popa. Tanto es así que la diputada de Ciudadanos en el Parlament de Cataluña no ha dudado en prodigarlo en sus redes sociales. ¿La última muestra de su amor? Una fotografía que ha compartido hace solo unos días con su marido en la que escribe: «Por muchos años, amor mío».

[EN IMÁGENES |La otra Inés Arrimadas: su vida antes de la política según sus amigos]

Per molts anys, amor meu 😘

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Y es que el amor entre Inés y Xavier, fraguado en los pasillos del Parlament entre 2013 y 2015 -cuando la gaditana se mudó a Barcelona-, siempre ha gozado de una salud intachable. Aunque no por ello ha sido una historia menos discreta. De hecho, son contadas las ocasiones en las que la política ha compartido fotografías con Xavier en Instagram. Las anteriores ocasiones fueron, de hecho, un primer ‘selfie’ de su marido en donde parecen estar en una casa rural, y dos más de sus excursiones en pareja.

En cualquiera de los casos, esta es la segunda vez en las que Inés abre su corazón a sus más de 63 mil seguidores al margen de su boda -la anterior fue en un posado con su marido el pasado 20 de mayo-. Un enlace que, cabe recordar, se celebró en su tierra, Jerez de la Frontera, bajo la atenta mirada de unos 200 invitados. «Fue una boda preciosa en la que disfrutamos mucho de su compañía, ya que, obviamente, por motivos laborales nos vemos bastante menos de los que nos gustaría», confesó a LOOK Serafín Mariscal, amigo y compañero de colegio de la diputada.

En resumidas cuentas, con esta nueva fotografía, la diputada no hace sino demostrar que el amor puede con todo. Incluso con el peor de los escenarios políticos en Cataluña.

EN IMÁGENES | La vida de Inés Arrimadas detrás de la política / Gtres
Pocos jerezanos se han podido olvidar de Inés, la hija de Rufino Arrimadas. Es la menor de cinco hermanos y en el pueblo todos conocen sus orígenes. Sus padres, Rufino e Inés, emigraron a Andalucía desde Salamanca y allí él culminó una carrera política que ahora su benjamina ha heredado. / Gtres
“No te dediques a la política”, le gritó su padre en más de una ocasión, pero ya era tarde. Que Inés llegara a ser diputada del Parlament no pasaba por la imaginación de nadie. Por su timidez, no llamaba especialmente la atención entre sus vecinos, y verla en televisión ha sido toda una sorpresa. “Nunca pudimos sospechar que llegaría hasta donde ha llegado”, cuenta un jerezano. / Gtres
La mayoría le agradece lo presente que tiene a su tierra a pesar de vivir a más de mil kilómetros de ella. Comparte circunstancia con la que fuera su compañera de clase, Gloria Fabregat, que desde Hong Kong atiende a LOOK para desvelar cómo era esa Inés estudiante que creció en Jerez. “Recuerdo que hacer trabajos con ella era un éxito seguro, por eso yo siempre me lo pedía”, comienza relatando. / Gtres
Arrimadas estudió en el centro Nuestra Señora del Pilar y allí forjó unas grandes amistades que la recuerdan con mucho cariño. “Además de estudiar en el mismo colegio vivíamos en la misma urbanización. Éramos vecinas, vamos. A ella le encantaba venir a mi casa porque siempre hablábamos catalán y a Inés le fascinaba escucharnos”, prosigue Gloria. / Gtres
“Le gustaba muchísimo el fútbol, Guardiola y el Barça. Es más, creo que le enseñé el himno. Ahora es muy fácil encontrar el himno del Barça en internet, pero por aquel entonces no teníamos esas facilidades. Recuerdo pasar tardes en su habitación cantando TOT EL CAMP”, recuerda Gloria. / Gtres
“Tenía una gran disposición a aprender, su expediente era de sobresaliente y era muy meticulosa y ordenada con sus apuntes. Tomaba nota de todo, así que no era extraño que luego sus apuntes circularan entre sus compañeros de manera regular”, explica su profesor, Juan Luis Escalante. / Gtres
“No tenía nada que ver con la Inés de ahora. Se ponía colorada con los chicos, por ejemplo, y desprendía una gran vulnerabilidad” asegura Escalante / Gtres
A pesar del tremendo giro que ha dado su vida en los últimos años, Inés continúa siendo fiel a su tierra. Sus vecinos tienen claro que no perderá sus raíces andaluzas por mucho que viva y luche por Cataluña. / Gtres
La Pitu, como la llamaban cariñosamente, se ha convertido en una jerezana de pro que también se siente catalana. A nadie parece importarle. “Sería una maravillosa presidenta”, gritan al despedirse. / Gtres

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