Dama de la solidaridad convertida en icono de estilo: Esther Koplowitz cumple 71 años

Nacida el 10 de agosto de 1953 en Madrid, Esther María Koplowitz y Romero de Juseu, es la primogénita del matrimonio formado por Ernesto Koplowitz Sternberg, un reconocido empresario, y de Esther María Romero de Juseu y Armenteros, VII marquesa de Casa Peñalver.

Su nombre es uno de los más sonados en la crónica social, pero también tras él predomina su eterno hermetismo. Un blindaje que siempre lleva por bandera. Esther Koplowitz siempre ha relegado a un segundo plano todo lo relacionado con su esfera personal, destacando así su faceta empresarial. Sin embargo, es utópico no hablar de la gran labor que ejerce tras la Fundación que lleva su nombre, cuyo único fin es la de utilizarla como un instrumento para llevar a cabo diversas actuaciones orientadas a ayudar a los más desfavorecidos.

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La Fundación Esther Koplowitz fue constituida en diciembre de 1995, formalizando así una labor que su fundadora desarrollaba a nivel personal desde los años setenta. La actividad que forma parte de esta entidad está centrada tanto en ayudar a los más desfavorecidos de la sociedad, como en apoyar la investigación biomédica y el avance científico, sin olvidar las numerosas acciones de fomento de la educación y la cultura.

Gracias a esta labor, en 2014, el alcalde de Barcelona, Xavier Trias, entregó a Esther Koplowitz la Medalla de Oro al Mérito Científico de la ciudad de Barcelona, por su extraordinaria labor filantrópica al frente de la mencionada Fundación. Al margen de esta importante faceta, Esther Koplowitz ha demostrado con el paso de los años ser una perfecta musa para la moda, convertida a su vez en un icono de estilo.

‘Total black’

Elegancia y sofisticación son dos palabras que definen el estilo de Esther Koplowitz. El pasado mes de marzo, la aristócrata saludó al Rey Felipe durante la asamblea ordinaria de la Diputación Permanente y Consejo de la Grandeza de España y Títulos del Reino. Cita que tuvo lugar en el Palacio Real de El Pardo (Madrid).

Para la especial ocasión, Esther Koplowitz volvió a hacer gala de su buen gusto en cuanto a moda se refiere. Se enfundó un vestido de cuello a la caja de tirantes y líneas rectas. Une prenda atemporal que combinó con una capa semitransparente a tono con la que elevó su look a otro nivel.

A sus pies, unos silettos del mismo color, creando así un perfecto total black que culminó con un clutch beige efecto metalizado.

Todo al blanco

La empresaria fue reconocida en los Premios Iberoamericanos de Mecenazgo 2020 presididos por la reina Sofía. Una reaparición para la que apostó por el blanco.

En aquella ocasión, Esther Koplowitz escogió un vestido blanco camisero largo que se caracterizaba por su silueta recta y ligeramente entallada, con corte hasta los tobillos. Presentaba un escote de cuello clásico, cierre frontal con botones y mangas largas con puños acabados en campana. Diseño que también tenía una apertura trasera, lo que facilitaba el movimiento. Como calzado, unas sandalias plateadas con tiras al tobillo.

Un perfecto fondo de armario

Para asistir a los Premios Inmerso Infanta Cristina 2008, la aristócrata apostó por una combinación ganadora compuesta por una blazer entallada roja con hombrera marcada y botonadura central y un pantalón de traje que remató con unas sandalias de tacón del mismo tono.

Elegante y a la última

Esther Koplowitz fue una de las invitadas a la boda real ente el Rey Felipe VI y la Reina Letizia (por aquel entonces príncipes de Asturias), que se celebró el 22 de mayo de 2004 en la Catedral de la Almudena, en pleno corazón de la capital.

Aquel día, Esther Koplowitz volvió a brillar con luz propia luciendo un vestido corto rojo valentino que conjuntó con una capa siguiendo la misma gama cromática. Combinó esta prenda con unos salones nude y un bolso a juego. Como complemento, una pamela en un color blanco roto.

Estilo clásico

Durante la entrega de Medallas de Oro al Mérito en el Trabajo, en 2014, Esther Koplowitz derrochó una gran simpatía, como es habitual. Ocasión para la que escogió un vestido corto de manga francesa y escote en ‘V’. Remató este estilismo con unos zapatos con plataforma y abertura central beige.

En clave ‘lady’

En el año 2000, Esther Koplowitz sorprendió con un conjunto vintage de lo más especial. Para una salida por Madrid, la empresaria apostó por un vestido en clave lady azul marino con topos blancos repartidos por todo el diseño. Como accesorio, llevó un cinturón de tamaño medio con hebilla dorada que marcó su figura.

También quiso añadir un foular rojo con acabado en flecos que colocó por encima de sus hombros. Culminó el outfit con unos zapatos de tacón negro con detalle 3D en la punta en blanco y un bolso de mano tipo sobre.

Sea como fuere a través de la ventana de los años, Koplowitz no sólo destaca por su papel como empresaria y su labor filantrópica, sino que ha demostrado que la moda también forma parte de su día a día y un claro reflejo de ello es que cada vez que hace una aparición pública derrocha ese aura de distinción que tanto la caracteriza y que ya lleva su propio sello.