Rania de Jordania, la royal que nadie esperaba en la boda de Jeff Bezos y Lauren Sánchez

Jeff Bezos y Lauren Sánchez están a punto de dar el sí, quiero en una de las bodas más esperadas del año. El fundador de Amazon y la periodista y filántropa estadounidense han elegido como escenario para su enlace la romántica ciudad de Venecia, donde todo está preparado para un evento de alto perfil que promete combinar glamour, exclusividad y una lista de invitados de auténtico vértigo. Aunque inicialmente se esperaba que la ceremonia tuviera lugar en los próximos días, la fecha se ha adelantado ligeramente, y según fuentes cercanas, la boda se celebrará este mismo viernes en la isla privada de San Giorgio, en una iglesia situada en medio de sus famosos jardines.

En las últimas horas, la ciudad de los canales se ha convertido en un hervidero de actividad. La llegada escalonada de los invitados ha generado gran expectación, tanto por los nombres implicados como por la opulencia del despliegue. Diane von Furstenberg, Ivanka Trump y Jared Kushner fueron algunos de los primeros rostros conocidos en aterrizar, seguidos de Miguel Bezos, padre del novio. Poco después, los propios Bezos y Sánchez fueron vistos llegando en helicóptero, trasladándose después al lujoso barco Abeona, embarcación de apoyo al impresionante yate Koru, anclado frente a las costas croatas. Desde allí regresaron a Venecia para asistir a una fiesta preboda organizada en una gran carpa junto al puerto, donde por fin pudimos ver el look elegido por la novia para esta primera celebración.

Sin embargo, lo que realmente ha sorprendido ha sido la presencia inesperada de miembros de la realeza. Aunque no se esperaba la asistencia de ningún royal, la llegada de la reina Rania de Jordania acompañada de su hijo, el príncipe heredero Hussein, su esposa Rajwa y su nieta Iman, ha causado auténtico revuelo. La familia del rey Abdalá II no solo aporta un aura de diplomacia y elegancia al evento, sino que confirma la estrecha relación personal que mantienen con Bezos y su futura esposa. Esta conexión se remonta a varios años atrás, con visitas privadas al palacio Al Husseiniya en Amán y la presencia de los soberanos jordanos en la fiesta de compromiso celebrada por la pareja en 2023.

La reina Rania, conocida por su sofisticado estilo, hizo gala de una sobriedad elegante al prescindir de colores vivos y apostar por un look completamente negro: camiseta de manga larga, pantalones, bolso tote de cuero y un Apple Watch, captando la atención a su llegada al puerto tras aterrizar en el aeropuerto Marco Polo. Su nuera, Rajwa, también hizo una aparición impecable, mientras que el príncipe Hussein fue visto con la pequeña Iman en brazos, un detalle entrañable que añadió un toque familiar a este entorno de lujo y celebridad.