Rania y Abdalá de Jordania: recordamos su fastuosa boda a pocas semanas de estrenarse como abuelos
La Reina Sofía y la princesa Irene de Grecia acudieron al evento
Rania de Jordania tenía 22 años cuando se caso con Abdalá
Abdalá y Rania de Jordania están a punto de estrenarse como abuelos porque Rajwa Al Saif, mujer del príncipe Hussein, está embarazada de su primer hijo. La princesa es uno de los miembros más desconocidos de la Familia Real Jordana, pero tiene una misión importante: dar a luz a un heredero al trono. La saga continúa, por eso es un buen momento para remontarnos al pasado y recordar cómo fue la boda del rey Abdalá, un evento que estuvo cargado de significado.
El matrimonio pasó por el altar el 10 de junio de 1993 en un momento muy concreto. Abdalá es hijo del rey Hussein, pero no era el primogénito, por eso nada hacía presagiar que iba a acabar accediendo al trono. Esa es la razón por la que el evento no fue cubierto con demasiada intensidad, a pesar de que fue bastante significativo, de hecho hubo representación de la Familia Real española porque acudió la Reina Sofía con su hermana Irene.
Rania de Jordania, el día de su boda. (Foto: Gtres)
La ceremonia tuvo lugar en Amán y la madre del Rey Felipe tuvo un papel protagonista, incluso estuvo en la recepción que Rania y Abdalá dieron en el Palacio Zahran. Ella tenía 22 años, nueve menos que su actual marido. En la actualidad Rania de Jordania tiene mucho peso mediático, pero en aquel momento su postura era bastante más discreta, a pesar de que no dejó nada a la improvisación.
El vestido de novia de Rania de Jordania
La reina consorte de Jordania no sabía que iba a ocupar tal puesto, pero se casó completamente ilusionada y por amor, así que su boda estaba muy estudiada. Le encargó su vestido al famoso diseñador Bruce Oldfield, quien ya ha trabajado con otras Casas Reales, como por ejemplo con la británica. El traje era una auténtica obra de arte, de hecho sus bordados estaban cosidos con hilos de oro.
Rania de Jordania ha sido comparada con la Reina Letizia en numerosas ocasiones porque tienen estilos similares. Lo cierto es que la mujer del rey Abdalá siempre ha cuidado mucho su imagen, por eso está a la altura de los grandes iconos europeos. El día de su boda llevaba un original moño que sostenía un inmenso velo, elemento que aportó un toque sofisticado a su look nupcial.
Boda de Rania de Jordania y el rey Abdalá. (Foto: Gtres)
Bruce Oldfield desveló en una ocasión que el peinado de Rania era tan alto que apenas cabía en el coche, por eso tuvo que hacer malabares para entrar en el vehículo y no llegar tarde al altar. La reina se cambió de vestido después de la ceremonia y disfrutó del banquete junto a sus 200 invitados, una cifra muy elevada, pero inferior a las que se barajan en los eventos de esta categoría.
Un matrimonio perfecto
Rania de Jordania ocupa un papel importante en la alta sociedad, por eso sus palabras tienen tanta repercusión, sobre todo ahora que va a convertirse en abuela gracias a su nuera Rajwa. Según unas declaraciones que recoge el diario La Nación, la consorte dio una entrevista para reafirmar su compromiso con el rey. Son uno. Forman un equipo indestructible.
Rania de Jordania, en una conferencia. (Foto: Gtres)
Según el balance que hizo ella misma, “el rey tiene el poder ejecutivo y político y económico. Yo trabajo principalmente a través de organizaciones de la sociedad civil. Pero, como en cualquier sociedad, en cualquier matrimonio, te sientas a cenar y hablas de tu día, y él me dice lo que ha hecho y lo que está haciendo y algunas veces le enseño un discurso que tengo”.
Desde que se convirtieron en reyes de Jordania lo tienen todo perfectamente organizado, algo que también se ha reflejado en su familia. Por eso la pregunta es: ¿Cómo se organizarán ahora que van a ser abuelos?