La amarga vuelta a Londres de Don Felipe y Doña Letizia

Con motivo de la reciente muerte de la Reina Isabel, aún hay muchas incógnitas en el aire sobre cómo se llevarán a cabo los distintos acontecimientos que suponen un fallecimiento de tal calibre. Uno de ellos, la celebración del funeral, la cual se espera que tenga lugar diez días después de la pérdida, es decir, el fin de semana del 18 de septiembre, siendo esta una fecha clave.

Si finalmente esa jornada es la elegida, será considerada como un día de luto nacional por el que todo el país deberá guardar dos minutos de silencio a mediodía, aunque no será un festivo nacional. Pero, si algo destaca especialmente, es que la muerte de una monarca tan popular y querida como Isabel II hará que sean muchos los políticos, personajes sociales y culturales y royals que quieran acercarse a dar el último adiós a la soberana, entre los que estarán Don Felipe y Doña Letizia.

Todo apunta a que, como representantes principales de la Familia Real española, serán los Reyes quienes viajen la semana que viene a Londres para despedir a la Reina Isabel y mandar sus condolencias a los más allegados a ella. Un movimiento muy especial, sobre todo teniendo en cuenta la buena relación existente entre los Borbones y los Windsor a raíz de la última y única visita oficial de Isabel II a España, en la cual estrechó vínculos con el Rey Juan Carlos y doña Sofía, además de pisar algunos de los parajes más espectaculares de Madrid, Sevilla, Barcelona y Mallorca.

No obstante, aún hay que esperar a que en los próximos días, los seres queridos de la Reina envíen una invitación a todas las Casas Reales europeas para que así tanto Felipe como Letizia puedan ir planeando su inminente viaje al Reino Unido, en el que coincidirán con reyes y herederos de todas partes, como ya sucedió con el fallecimiento de Felipe de Edimburgo.

Fue el 17 de abril del pasado año cuando casi 2.000 personas se reunieron para ser partícipes de una solemne ceremonia religiosa celebrada en la Abadía de Westminster para despedir al que fuera príncipe británico. Una cifra muy alta que deja entrever que, en el caso de su esposa, probablemente será superada con creces dado el cariño y la admiración que sienten todos aquellos que poseen su cargo aunque en distintos países.

Dada la gran amistad que forjó la Reina Isabel con el Rey Juan Carlos, y sobre todo teniendo en cuenta que Doña Sofía y Felipe de Edimburgo eran familia, ha surgido otra incógnita que aún permanece en el aire. ¿Irá el Rey emérito a despedirse presencialmente de Isabel II? Aunque es muy probable que esto no ocurra, sí que lo hará su hijo para hacer ver al clan Windsor que están volcados con ellos en esta nueva etapa en la que la “tía Lilibet”, como llamaba Felipe VI a la monarca cariñosamente, ya no estará presente.