La princesa Amalia debuta en una cena de Estado con su tiara de rubíes favorita

Corrián las 19:30 horas de la tarde de este miércoles cuando la princesa Amalia de los Países Bajos, heredera al trono del país del noroeste europeo, se ha dejado ver junto a sus padres, los Reyes Guillermo Alejandro y Máxima, para recibir a sus homólogos españoles, el Rey Felipe VI y Doña Letizia, en una cena de gala organizada en el Palacio Real de Ámsterdam, con motivo del viaje de Estado de los monarcas. Su presencia en la cita supone un momento histórico y trascendental, pues se trata de la primera vez que la heredera al trono de Holanda participa en un acto de Estado de estas características, como anfitriona junto a sus padres.

Pese a que a sus 20 años, la hija mayor de los reyes Máxima y Guillermo cada vez va teniendo un mayor protagonismo oficial, nunca la habíamos visto en un acto como el de hoy. El pasado año realizó su primer viaje internacional al Caribe, en compañía de sus padres, a los que también acompañó a la boda de Hussein de Jordania. Asimismo, junto a su abuela, la princesa Beatriz de Holanda, estuvo en la recepción previa a la coronación del rey Carlos III que se celebró en el Palacio de Buckingham en mayo de 2023. Un acto en el que, coincidió con otra heredera europea, la princesa Elisabeth de los Belgas.

Para su debut, sea como fuere, la princesa Amalia ha optado por un vestido de color azul medianoche de Jan Taminiau que ha recordado,  inevitablemente, al estilismo con el que su madre, la Reina Máxima de Holanda, deslumbró en Buckingham, junto a la fallecida Reina Isabel II, en 2018. La joven ha combinado la prenda con una romántica y vaporosa capa de tul semitraslúcido, y completado el estilismo con la tiara del pavo real, que ya lució en la cena posterior a la boda de Hussein y Rajwa de Jordania. Se trata de una pieza que data de 1897 y que fue creada por la casa Johann Eduard Schürmann & Co para la reina Guillermina, bisabuela del actual rey de los Países Bajos, con rubíes que pertenecieron a la reina Sofía, la primera mujer de su padre, el rey Guillermo III.

Esta no es la primera vez que Amalia luce tiara. Hasta la fecha, la princesa se había dejado ver con hasta tres diademas diferentes del joyero de los Orange. A pesar de que, a diferencia de otras princesas de su generación -como es el caso de Ingrid de Noruega-, no tiene una diadema propia que le hayan regalado por su mayoría de edad, sí que ha tenido acceso a varias de las diademas del joyero de la Casa Real.

Pero esto no es todo. La heredera al trono ha lucido, además, prendida en la parte lateral de su vestido, separada de la banda de color amarillo y blanco, la condecoración que le ha otorgado el Rey Felipe: la gran cruz de la Orden de Isabel la Católica, que fue instituida por Fernando VII el 14 de marzo de 1815 con el nombre de Real Americana Orden de Isabel la Católica con el fin de «premiar la lealtad acrisolada y los méritos contraídos en favor de la prosperidad de aquellos territorios».

Apenas unas horas antes del evento, las cámaras de Gtres han captado a la princesa Amalia llegando al Palacio Real con una gabardina beige y un enorme bolso de color marrón. La heredera al trono ha saludado a la prensa congregada en las inmediaciones del lugar antes de entrar al enclave, con una ligera sonrisa y muy consciente de la expectación que ha generado su inminente debut en los últimos días. Junto a ella, algunos ayudantes entraban también al Palacio con maletas que probablemente guardaban parte del atuendo con el que Amalia ha sorprendido esta noche.

La princesa Leonor no ha acompañado a sus padres a Holanda

En la velada también han estado presentes la princesa Beatriz, madre del rey Guillermo, y la princesa Margarita, tía del soberano neerlandés; no así la Princesa Leonor. Aunque la heredera ya ha cumplido la mayoría de edad, en estos momentos está centrada en su formación militar en la Academia General de Zaragoza, por lo que, no ha acompañado a los Reyes Felipe y Letizia a los Países Bajos.

El de esta vez es el decimosexto viaje de Estado que realizan Felipe y Letizia desde su proclamación como Reyes de España en 2014, aunque la primera que se desplazan a Holanda. La última vez que un monarca de nuestro país viajó a los Países Bajos oficialmente fue en 2001, con los ahora Reyes eméritos, Juan Carlos I y Doña Sofía, a los mandos.  visitaron el país vecino. Para entonces, Máxima Zorreguieta era la prometida de Guillermo y fue una de sus primeras recepciones a mandatarios extranjeros.