Las degarradoras palabras de Mette-Marit de Noruega en su peor momento: "Ha sido un año muy duro"

Desde que se conociera la primera detención del hijo mayor de la princesa Mette-Marit de Noruega, desde la casa real y el entorno de la esposa del príncipe Haakon han optado por mantener una actitud discreta para permitir el desarrollo de las investigaciones por parte de las autoridades y evitar en la medida de lo posible que la situación afecte a la imagen de la Corona. Por este motivo ni la princesa ni tampoco el heredero han querido hacer declaraciones sobre el escándalo que rodea a Marius Borg, aunque no han dejado de mostrar su apoyo al joven a nivel particular.

Sin embargo, a pocos días de que termine el que, sin duda, está siendo uno de los años más complicados para la familia real, la princesa ha roto su silencio y se ha pronunciado sobre la situación de su hijo mayor. Según ha contado, ha sido una etapa muy dura para toda la familia real, que está poniendo a prueba a los príncipes y a su entorno. Un año que Mette-Marit ha definido como exigente, al tiempo que ha dicho que no va a ocultar las dificultades que la familia está atravesando. La princesa se ha pronunciado en un programa especial de la cadena estatal NRK sobre la familia real, en el que también han intervenido otros miembros de la institución. «Ha sido duro. No se puede decir otra cosa. Ha sido muy, muy duro para nosotros», ha declarado.

La esposa del heredero ha explicado que la familia ha recibido ayuda profesional del sistema de salud, aunque no ha matizado si el apoyo ha sido psicológico o de otro tipo: «No creo que hubiésemos sido capaces de soportar una situación así sin esa ayuda, juntos como familia, y al mismo tiempo mantener nuestras obligaciones para con el pueblo noruego», ha dicho Mette-Marit. Aunque no lo ha recalcado de manera explícita, todo apunta a que la princesa y su entorno ha estado participando en algún tipo de terapia para poder afrontar todo lo que está ocurriendo.

Además de la situación de Marius Borg, hay que tener en cuenta que la familia real también ha tenido que hacer frente a otras dificultades a lo largo de 2024. Por ejemplo, las polémicas en torno a la princesa Marta Luisa de Noruega, la delicada salud del rey Harald o la enfermedad que afecta a la esposa del príncipe Haakon. Mette-Marit de Noruega sufre desde hace varios años una fibrosis pulmonar que condiciona su agenda y que en los últimos meses ha provocado que se haya tenido que tomar un descanso para someterse de nuevo a tratamiento.

El horizonte del hijo mayor de la princesa es cuanto menos complicado. Marius Borg ha sido detenido en varias ocasiones y ha estado detenido e incluso en prisión durante varios días. Además, su madre decidió su ingreso en un centro especializado en el Reino Unido, del que se fugó. A pesar de que no forma parte de la familia real ni tiene compromisos oficiales, ha pasado la mayor parte de su vida vinculado a la misma y, además, es el hermano mayor de la princesa Ingrid. La princesa está llamada a ocupar el trono después de su padre.