La tiara Flor de Lis: una elección estratégica con historia
A la reina Letizia solo le hizo falta un elemento para eclipsar por completo a la primera dama argentina, Juliana Awada, en la cena de gala celebrada anoche en el Palacio Real con motivo de la visita de estado el presidente Mauricio Macri. La tiara Flor de Lis se convirtió en protagonista de la velada por derecho propio; se trata de una joya única con una historia fascinante a sus espaldas.
Doña Letizia quiso marcar la importancia del evento con esta elección tan especial. Se trataba de la primera vez que usaba esta tiara, que es, sin duda, la pieza más valiosa del joyero real. Representa a la monarquía y su estreno sobre la cabeza de la Reina no fue casual. De esta forma, dejaba clara su posición y la de su invitada en un duelo estilístico sin precedentes. Muy oportunamente, Letizia eligió un look sobrio y minimalista para ceder todo el protagonismo a la espectacular joya.
La tiara Flor de Lis esconde tras ella una historia fascinante. Fue un regalo del rey Alfonso XIII a Victoria Eugenia de Battenberg con motivo de su boda. Creada en 1906 por la casa Ansorema, joyería de la Casa Real Española, está realizada en platino y diamantes y su diseño consta de flores de lis (emblema heráldico de los Borbones) unidas por roleos y hojas.
Fue un regalo del rey alfonso XIII a su prometida, Victoria Eugenia, antes de su boda / Gtresonline
Pertenece a las denominadas ‘joyas de pasar’, que pertenecieron a la reina Victoria Eugenia y de las que solo pueden hacer uso las Reinas de España. Se trataba de una de sus piezas favoritas y la lució en muchas ocasiones. Incluso, se dice que, cuando estaba enferma, la mandaba traer a la cama para contemplarla. La incluyó en su testamento de modo que pasó a su hijo, don Juan de Borbón y, posteriormente, al rey Juan Carlos. Así llegó a la reina Sofía, siendo la soberana que más uso le ha dado.
La reina Sofía la usó en la última gala de su reinado / Gtresonline
Ahora doña Letizia ha tomado el relevo. Después de más de dos años de reinado se siente plenamente preparada sentir el peso de la historia sobre sus hombros y dar luz a tan magnífica pieza.