Las idílicas navidades de antaño de la Familia Real
La complicada situación sanitaria sumada a las circunstancias especiales que rodean a los Borbones en los últimos meses hacen que estas sean unas de sus navidades más difíciles
En el pasado, los miembros de la familia La familia Borbón se enfrenta a su Navidad más complicada. Hace años resultaría inimaginable que se pudiera llegar a una situación como la que se ha alcanzado este año, pero los acontecimientos de los últimos tiempos han precipitado la disgregación entre los miembros de la Familia Real y la Familia del Rey.
Estas navidades van a ser muy diferentes para todos los miembros de la Familia Real / Gtres
Este año no habrá multitudinaria reunión en el Palacio de la Zarzuela. La crisis del coronavirus no permite que se junten más de diez personas, pero lo más grave es la crisis interna generada por la situación de don Juan Carlos que, a pesar de los rumores iniciales, permanecerá en Abu Dabi por precaución, ya que pertenece a uno de los grupos de mayor riesgo frente a la enfermedad.
Atrás han quedado los años en los que la familia al completo se reunía en el Palacio de la Zarzuela para festejar estas fechas tan especiales. El punto de partida de las celebraciones era el envío de la tradicional felicitación navideña desde el departamento de prensa, una costumbre que aún se mantiene, aunque sus protagonistas hayan cambiado radicalmente.
El Rey Juan Carlos pasará las fiestas fuera de España / Gtres
El día 24 de diciembre se celebraba una cena en Zarzuela a la que asistían tanto el núcleo central de la familia, como los primos Gómez-Acebo y Zurita. El menú consistía en un plato central con el pavo como protagonista y una serie de entrantes variados. De postre, dulces navideños. Se daba la noche libre a la mayor parte del personal de Zarzuela, para que pudieran pasar la velada en compañía de sus familias.
El día 25 ha ido cambiando de escenario. Doña Letizia ejerce de anfitriona en la Casa de Asturias, donde suele acudir la familia Ortiz Rocasolano a celebrar estas fechas. Sin embargo, también doña Pilar hacía en muchas ocasiones de anfitriona en su casa de Puerta de Hierro. Aunque al principio se intercambiaban todos regalos, con el tiempo se pasó al sistema del amigo invisible, dejando a Papá Noel para los más pequeños.
Son las primeras navidades sin la infanta doña Pilar / Gtres
Una vez pasada la Navidad, era habitual que la Familia Real se disgregase. En un principio lo habitual era que todos se trasladasen a Baqueira hasta la noche de Reyes. Allí celebraban tanto el fin de año, como el cumpleaños del rey Juan Carlos -el día 5 de enero-. Sin embargo, una vez que las infantas se casaron y doña Letizia llegó a la vida del príncipe de Asturias, las visitas a la estación de esquí fueron cada vez más escasas. Cuando la familia se encontraba en Baqueira solía solicitar el cierre de alguno de los restaurantes de la zona, donde disfrutaban de las mejores carnes, aunque para la reina Sofía siempre había pescado o platos de verduras.
Hubo un tiempo en el que la familia pasaba el fin de año en la estación de esquí de Baqueira / Gtres
Este año todo será diferente. Al margen de que Baqueira dejó de tener su sentido cuando los hijos de don Juan Carlos y doña Sofía comenzaron a hacer sus planes, ahora, más que nunca, la familia está muy separada. Con don Juan Carlos tan lejos, no se sabe si la infanta Elena decidirá visitarlo en algún momento; la infanta Cristina pasará las fiestas con su familia política previsiblemente, a la espera de que a Urdangarin le concedan algún permiso y los Reyes no podrán hacer una escapada como hacían antaño debido a la crisis sanitaria.