Familia real británica

Camilla Parker Bowles sobre su vida como amante del príncipe Carlos: “Fue horrible vivir así”

Camilla Parker
Camilla Parker en una imagen de archivo / Gtres
  • LOOK
    • Actualizado:

Han tenido que pasar más de 10 años para que Camilla Parker Bowles se haya animado a dar su primera entrevista como miembro de la familia real británica. Una larga espera que, sin embargo, ha merecido la pena. La duquesa de Cornualles se ha abierto en una entrevista exclusiva para el Mail on Sunday’s You Magazine en la que, entre otras cosas, ha hablado sobre las grandes dificultades a las que tuvo que enfrentarse cuando todavía era amante del príncipe Carlos.

La relación clandestina entre el ahora matrimonio comenzó en los años 70, cuando Camilla aún estaba casada. Por eso, cuando el asunto salió a la luz se convirtió en un escándalo que sobrepasó las fronteras de las islas británicas. La infidelidad del heredero al trono con una señora casada puso en el foco mediático a una mujer que ahora se ha abierto para contar cómo vivió esa época.

Príncipe Carlos de Inglaterra y Camilla Parker

La pareja se casó en el año 2005 / Gtres

“Fue horrible vivir así”, sentencia en la entrevista al recordar que “no tenía donde ir” porque todo el mundo la miraba por la calle. “Fue una época profundamente desagradable y no se lo desearía ni a mi peor enemigo. No habría sobrevivido de no haber sido por mi familia”. Una situación que duró “alrededor de un año” y en la que aprovechó para pasar “el tiempo leyendo. Pensé: ‘Si estoy aquí atrapada al menos puedo hacer algo positivo y leer todo lo que me apetece y aprender a pintar (aunque con la pintura no tuve mucho éxito)’.»

A pesar de todos los meses que tuvo que permanecer “escondida”, cuenta que la peor parte para ella fue el interés que despertaba a la prensa. “Estaban fuera de control en aquella época. Han cambiado mucho desde entonces”, confiesa Camilla. Una época que también recuerda su hijo Tom: “Los paparazzi solían seguirnos a todas partes y acecharnos como fantasmas. Solíamos guardar unos prismáticos en el cuarto de baño de mi madre y mirábamos todas las mañanas para ver cuántos estaban escondidos entre los arbustos. En el momento de mayor interés podría haber media docena escondidos. Llegó a parecernos totalmente normal”.

Lo último en Casa Real

Últimas noticias