El Aga Khan, la mano amiga por la que la infanta Cristina se instaló en Suiza

Adiós a una de las figuras más destacadas del círculo del Rey Juan Carlos. El príncipe Karim al Hussaini Aga Khan IV ha fallecido en Lisboa a los 88 años. Una triste noticia que ha confirmado su fundación a través de un comunicado que se ha publicado en diferentes canales: «Su alteza el príncipe Karim Al-Hussaini, Aga Khan IV, 49o imán hereditario de los musulmanes ismailíes chiítas y descendiente directo del profeta Muhammad, falleció pacíficamente en Lisboa el 4 de febrero de 2025 a los 88 años, rodeado de su familia. El príncipe Karim Aga Khan fue el fundador y presidente de la Red de Desarrollo Aga Khan», reza el texto.

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El gran apoyo de la infanta Cristina

El Aga Khan ha sido una de las figuras más importantes en la vida del padre de Felipe VI. La amistad del Rey Juan Carlos con el Aga Khan se remonta a la infancia, cuando ambos coincidieron en las aulas del colegio de los padres marianistas de Friburgo. Se hicieron amigos muy pronto y su buena sintonía se ha ido extendiendo a las siguientes generaciones. El Aga Khan estuvo en la boda de los Reyes don Felipe y doña Letizia, de la misma manera que Juan Carlos y Sofía han estado en algunas celebraciones importantes de la familia del príncipe, como el enlace de su hija, la princesa Zahra, en Chantilly en 1997.

Tan estrecha era su relación que el padre de doña Cristina no dudó en interceder por ella cuando estalló el Caso Nóos y consiguió su traslado a Suiza. Allí comenzó a trabajar para la Fundación Aga Khan. El príncipe se convirtió en uno de los principales apoyos de la infanta Cristina en su primera etapa en Ginebra, cuando residía allí con sus cuatro hijos y todavía casada con Iñaki Urdangarin.

Durante un tiempo, la infanta Cristina ejerció como enlace de la Fundación La Caixa con varias agencias de las Naciones Unidas y con organizaciones no gubernamentales con sede en Ginebra y trabajó a tiempo parcial para el Aga Khan. Sin embargo, a finales del año 2020, el portal Vanitatis confirmó que doña Cristina había dejado su trabajo como responsable del área internacional de la Obra Social de la Fundación La Caixa, pero continuaba con su labor en la Fundación Aga Khan en Ginebra. Eso sí, el príncipe había trasladado su base de operaciones a Portugal, país del que obtuvo la nacionalidad en 2019 y en el que ha fallecido.

La escudera de la infanta 

La relación de la infanta Cristina con el Aga Khan y su familia va más allá de lo profesional y ha heredado el especial vínculo de su padre con el príncipe. De hecho, la hija del Aga Khan, la princesa Zahra, es íntima amiga de la infanta Cristina desde hace años.

Fue ella la que ejerció de escudera de doña Cristina cuando se instaló en Ginebra en el verano de 2013. Hija del Aga Khan y de la ex modelo Sarah Frances Croker Poole, Zahra tuvo mucho que ver en que la infanta eligiera la Escuela Internacional de Ginebra como centro de formación para sus hijos y la ayudó a encontrar piso en el centro de la ciudad. Además, también eran compañeras de trabajo, aunque en áreas distintas de la Fundación Aga Khan.

En unas declaraciones a ABC en el año 2014, Zahra habló de su relación con doña Cristina: «Mis hijos y los suyos van al mismo colegio. De vez en cuando la veo cuando los lleva o los va a recoger. Cristina y yo nos conocemos de toda la vida. Somos amigas desde pequeñas y nuestros padres también lo son, de toda la vida», recalcó.