Isabel Preysler habla de la soledad de su hija Tamara Falcó

Isabel Preysler ha reaparecido con la tranquilidad de quien tiene ‘palco de abono’ en su encuentro con los medios. Incluso, se ha permitido la valentonada de llegar tarde. No estaba desaparecida como se ha publicado, Isabel ha tenido una importante razón por la que alejarse del foco. Ha reaparecido después de un tiempo de sequía informativa y lo ha hecho, como no podía ser de otro modo, en un acto de Porcelanosa, imagen de la que ejerce de fiel embajadora. Acompañada de su aureola de ‘reina de corazones’ y con más de dos horas de retraso, Preysler ha hablado de todo: de la soledad confesa de su hija Tamara, de su papel de abuela, de la relación que mantiene con los hijos de Vargas Llosa y de lo «madraza» que es Chábeli Iglesias.

[LA LLEGADA DE ISABEL PREYSLER EN 10 IMÁGENES]

A prisas y con cronómetro, Isabel no ha desviado ninguna pregunta. De todo ha hablado, hasta de los planes inciertos de verano. Parecía inevitable preguntarle a Isabel por las últimas declaraciones de Tamara Falcó en las que aseguraba que se sentía «sola» dentro de una familia «emparejada». «Eso son cosas de Tamara, no hay que darle importancia. Si está sola es porque quiere, es un poco difícil. Mira que le presento a chicos que conozco, pero pasa de todo. De todas formas, la veo perfecta sin novio». ¿Qué piensa Isabel acerca de que su hija aún esté «aceptando» su amor por Vargas Llosa? «Son cosas de Tamara, ni hagáis más caso de eso», ha respondido la soberana del ‘couché’.

Ahora bien, ¿dónde ha estado Isabel Preysler en estos meses de desconexión mediática?. No ha estado desaparecida del mundanal ruido tanto tiempo como se asegura. «Sois muy exagerados, he estado menos tiempo del que decís. Lo que pasa es que si me veis mucho es demasiado y poco es muy poco para vosotros», ha asegurado, entre risas, la soberana de las marcas. Estas semanas ha tenido motivos de peso para no dejarse ver: «He estado en Estados Unidos con Mario y después he visitado a mis nietos en Miami. Están riquísimos y enormes. Me llaman ‘Lala’ y los mimo cuanto puedo». De la madre de los pequeños, su hija Chábeli Iglesias, solo guarda buenas palabras: «Es una madraza un poco exagerada, pero perfecta».

Buena sintonía con los hijos y verano sin fotógrafos

En un momento de la entrevista, Isabel Preysler se ha sincerado acerca de la verdadera relación que la une a los hijos de su nueva pareja: «Me llevo muy bien con Álvaro y Mario está en buenas relaciones con Morgana. Lo único que quiero es paz y que se lleven bien». Estas confesiones vienen a raíz de un supuesto mal afecto entre Morgana e Isabel Presyler. La relación entre padre e hija fue uno de los precios que tuvo que pagar el escritor cuando salió a la luz pública su romance con Isabel Preysler. Ante lo que parecía una afrenta hacia su madre, Patricia Llosa, tanto ella como su hermano Gonzalo optaron por distanciarse de su padre. Morgana encauza el buen camino, pero, ¿qué pasa con Gonzalo?

Isabel enmudece y redirige la conversación con los medios hacia sus planes de verano con el Premio Nobel: «Aún no hay planes concretos para el verano, el año pasado nos tuvimos que ir al quinto pino para evitar a la prensa y luego resulta que estaba allí. ¡No solo hay que temer a las medusas!». Un pelín molesta se muestra ante la pertinaz insistencia de la prensa acerca de su boda con Mario. «Nos veis que estamos bien como estamos, ¿no?», espeta. Donde sí se ha mostrado tajante ha sido a la hora de desmentir el embarazo de su hija Ana Boyer cuyas últimas instantáneas incitaban a ello: «Qué cosas decís, qué va, en absoluto».