El Gobierno da marcha atrás y permite las rebajas
El Ejecutivo ha anunciado que no se permitirán acciones comerciales desde las tiendas para evitar aglomeraciones
Cambio de tercio para las rebajas y algo de luz para el comercio: el Gobierno ha decidido permitir las rebajas desde este mismo lunes 18 de mayo en tiendas físicas. Incluso aquellos territorios que continúen en fase 0. Eso sí, pone la condición de que no se genere ningún tipo de aglomeración porque entonces eso podría suponer el cese inmediato de esta actividad promocional. Este es el principal cambio respecto a la orden dictada por el ministerio de Sanidad el pasado 9 de mayo. pasado 9 de mayo donde se estableció que en la fase 1, los establecimientos no podrían anunciar ni llevar a cabo acciones comerciales que pudieran dar lugar a congregaciones de público
Aquello fue un nuevo varapalo para el comercio en plena crisis del coronavirus. Cuando la desescalada no había hecho más que comenzar y las tiendas empezaban a ver un poco de luz de cara a una recuperación económica que se antoja muy complicada, el Gobierno anunció la cancelación de una de las citas más importantes para el sector: las rebajas de verano. Una medida que tenía el objetivo de evitar las aglomeraciones que se producen en los comercios con motivo de la campaña de descuentos y que continuaba la tendencia que llevó a la cancelación de otros eventos como las Fallas o la Semana Santa.
Una mujer delante de un cartel de descuentos / Gtres
En estos momentos en los que se ha conseguido superar la curva de contagios gracias a las medidas de confinamiento y no hay aún ni medicación eficaz ni vacunas, la única manera de ‘contener’ la expansión del virus es extremando la higiene y manteniendo la distancia de seguridad, lo que hace pensar en que cualquier evento en el que vaya a concentrarse un número alto de personas puede convertirse en un foco de contagios. Esto se aplica claramente a las rebajas en grandes centros comerciales -que aún están cerrados-, así como en tiendas más pequeñas, ya que generan irremediablemente la afluencia de persona.
Por este motivo, desde el Ejecutivo se publicó una disposición en la que se establecía que los comercios no solo tendrían que controlar el aforo, sino que no podrían realizar ningún tipo de acción comercial para evitar aglomeraciones. Esto aplicaba a las rebajas en tienda física, las de toda la vida, pero no a los descuentos online, cuyas ventas además han aumentado en estos meses y muchas empresas han aprovechado para hacer campañas de promoción. Aunque se trata de una disposición lógica en estas circunstancias, la medida tomada en un principio por el Gobierno de Pedro Sánchez generó cierta polémica entre los pequeños comerciantes, ya que muchos contaban con la campaña de rebajas para poder recuperar parte de las pérdidas que ha generado la crisis de la covid-19. Por este motivo, el Ministerio de Comercio remitió una comunicación a la Asociación Empresarial del Comercio Textil, Complementos y Piel (Acotex), así como a los mayores grupos de distribución de moda de España en la que matizó que no se prohíben las rebajas como tal, sino cualquier campaña en la que se fomenten las aglomeraciones: “sí es posible llevar a cabo rebajas y promociones en los establecimientos físicos siempre que éstos estén en condiciones de adoptar todas las medidas que sean necesarias con el fin de evitar que se produzcan aglomeraciones a consecuencia de dichas rebajas o promociones”.