El agitado año de los Mohedano

Año complicado para los Mohedano. Siempre se ha tratado de una de las familias más mediáticas del panorama nacional y, por ello, constantemente se ha visto ubicada en el foco mediático. Sin embargo, cuando sus vidas parecían estarmarcadas por la estabilidad y tranquilidad, el clan volvía agitarse a raíz del estreno de la docuserie de Rocío Carrasco, aquella que corría bajo el nombre de Rocío, contar la verdad para seguir viva.

El fenómeno televisivo vio la luz el pasado mes de marzo y desde entonces se puede decir que ni un solo miembro de la saga ha sido capaz de pasar desapercibido ante los medios de comunicación. Cada uno a su manera, pero todos ellos han reaccionado directa o indirectamente ante un documental que, según ha señalado su propia productora en varias ocasiones, ha llegado a batir récords históricos de audiencia y a conmover a un país, que enseguida quedó dividido.

Anteriormente al estreno del formato, parte de los Mohedano llevaban una vida enfocada en la televisión, un medio que utilizaban para trabajar sin necesidad de recurrir a las polémicas más sonadas del clan. Rocío Flores se dedicaba a probar suerte en el mundo del reality show, mientras que su tía, Rosa Benito, ocupaba un importante lugar en un programa de cabecera como Ya es mediodía. Por el contrario, Gloria Camila se estrenaba como actriz fichando por una serie de RTVE en la que ha estado trabajando hasta hace poco, a la vez que Amador realizaba sus apariciones esporádicas y Rosario atendía a sus compromisos musicales en un segundo plano mediático. Solo quedan Gloria y José Antonio, que lejos de querer llamar la atención, disfrutaban de una vida discreta y alejada de las cámaras.

Fue estrenarse el documental y automáticamente todos ellos saltaron de nuevo a la palestra, presenciando algunos de ellos, como es el caso de Rocío Flores, una presión mediática que, en numerosas ocasiones, le costaba soportar. Ha llorado, ha sufrido, se ha enfadado e incluso ha sacado su lado más protector con su hermano y su padre. En definitiva, una vorágine de sentimientos y sensaciones experimentadas por todos ellos y provocadas, en su mayor parte, por el hecho más significativo del año, el momento en el que Rocío Carrasco decidió romper su silencio.

Todos ellos permanecen unidos por el recuerdo de la matriarca del clan, Rocío Jurado. Es más, son varias las veces que se han reunido con el propósito de honrar la memoria de la chipionera, a excepción de Rocío Carrasco. Y es que pese a haber afrontado las desgarradoras confesiones de la heredera universal  y de haber actuado de maneras totalmente distintas, todos ellos han  vivido uno de los años más trepidantes de su vida. No solo se han visto involucrados en una historia que ha conseguido remover muchas conciencias, sino que, además, han visto cómo la ‘desaparecida’ de la familia se convirtió en la protagonista indiscutible nada más regresar a la televisión. El medio le dio su lugar, pero, según ella misma ha confesado en los últimos meses, no ha sido bien recibido por su familia y mucho menos por su hermana y por su hija, tal vez, dos de las personas que más han sufrido con esta historia, o al menos, las que más se han atrevido a exponerlo frente a las cámaras.