¿Sabías que los Incas eran un pueblo muy trabajador?

¿Sabías que en España existe la Ley de vagos y maleantes? Aprobada en la Segunda República en el año 1933, esta Ley surge con el fin de ponerle fin a cualquier actitud de vida que no encaja con la socialmente establecida. Si bien parece algo muy impactante, lo cierto es que existen civilizaciones más antiguas que ya predicaban este tipo de costumbres. A continuación, te contamos todo acerca de esta llamativa ley para regular la vagancia.

Los incas: el pueblo que no permitía la presencia de vagos y maleantes

A pesar de que, en el siglo pasado, en España ya se habló de una ley que regulaba la vagancia como mal comportamiento social, lo cierto es que al otro lado del Atlántico existió una civilización que se adelantó en lo que respecta a este tipo de normativas. Los incas ya sancionaban la vagancia y la falta de voluntad. Esta civilización perseguía a aquellos que no eran capaces de aportar algo saludable a la sociedad.

Los mendigos, vagabundos, rufianes y maleantes, no tenían lugar en una civilización que apuntaba directamente a un fin de enorme productividad. Los incas fueron una de las civilizaciones más prestigiosas de América, debido a su gran conocimiento y a sus extraordinarios descubrimientos. Entonces, ¿cómo es posible pensar que este tipo de personas aceptarían la vagancia y la mediocridad entre ellos?

Los incas: una sociedad avanzada

Es extraño pensar en el funcionamiento de la civilización Inca, más que nada si tenemos en cuenta la decadencia y los defectos tan evidentes de las sociedades actuales. En un mundo tan primitivo, ¿cómo es posible que estas personas hayan creado un sistema social tan perfecto y de tan alta productividad? Lo cierto es que el imperio inca fue una civilización muy inteligente, con gran sentido de pertenencia. No es por nada que su nombre quedó de manera tan marcada en los libros de historia de todos los países del mundo.

Solo nos queda aprender y preguntarnos, ¿cómo es que estas personas, en una civilización tan lejana, lograron crear un sistema social tan perfecto? En el territorio Inca no había lugar para la pereza o la desgana. Todos, desde su propio lugar, eran capaces de aportar algo saludable al sistema. Es justamente, así como debería funcionar una sociedad avanzada y saludable.

¿Conocías ya este hecho tan particular de la civilización Inca? Estamos seguros de que te encantará seguir aprendiendo por tu propia cuenta acerca de esta sociedad tan extraordinaria. Te asombrará todo lo que descubrirás al estudiar cómo funcionaba la civilización Inca. Si te ha parecido interesante este artículo, compártelo con tus amigos y contactos.