¿Cómo seducía Casanova a las mujeres?

Giacomo Casanova era un hombre aventurero con la capacidad de recorrer largas distancias para saciar su espíritu libertino y amante. Nació el 2 de abril de 1725 en Venecia, Italia, en el seno de una familia de actores. Su padre murió cuando él tenía 8 años y su madre se dedicó al teatro, dejando de lado los cuidados de Casanova y sus cuatro hermanos. ¿Cuál era su poder para seducir? Se dice que hasta sus 46 años había enamorado a 122 mujeres, algunos historiados creen que 132.

Escribió sus conquistas

Pese a no ser precisamente muy agraciado físicamente, tenía dotes intelectuales importantes que le hicieron destacarse: era historiador, escritor, filósofo, diplomático, matemático y violonchelista. En su autobiografía titulada en francés Histoire de ma vie, Casanova narró y describió la forma en que conquistó a tantas mujeres. Sus descripciones pueden parecer misóginas para algunos expertos y, a la vez, parece tener un número de amantes poco llamativo si se tiene en cuenta el libertinaje de la época.

Las claves para seducir de Casanova

Sin embargo, su historia narrada en 3600 páginas convulsionó a Europa. Se le acusó de libertinaje, lo que causó que fuese apresado por los inquisidores. Casanova contó una a una sus anécdotas detallando la forma en que seducía. “Los placeres más dulces son aquellos que son más difíciles de conseguir”, para él era importante dedicarle tiempo a cada aventura.

Además, la clave: valentía. Tener valor es indispensable para enamorar, según las memorias de Casanova, “la fuerza sin confianza es inútil”. Ser cauteloso y misterioso guarda aún más intensidad, “pues, ¿qué es el amor sino algo más que un poco de curiosidad?”.

Casanova era un hombre libre y, aunque se volviese loco por amor, prefería su libertad. Evitaba a toda costa los apegos. Al mismo tiempo, se entregaba en cuerpo y alma. “Empezaré con una confesión: todo lo que he hecho en mi vida, sea bueno o malo, lo he hecho de manera libre; soy un ser libre”, es una de sus frases más célebres.

Libertino y bohemio, pero un hombre que tiene “suficiente poder sobre sí mismo para esperar a que su naturaleza recupere el equilibrio”, eso, para él, es sabiduría.

Casanova tenía la capacidad conquistar a todos, no solo a mujeres. Sabía perfectamente lo que decía y cómo lo decía. De esa manera, alcanzó regodearse con personas como Voltaire o Catalina La Grande. Murió en República Checa en 1798.

Actualmente, su nombre sigue sonando y es relacionado con hombres que seducen muchas mujeres. Sigue siendo referencia en el mundo actual y su historia narrada nos da un vistazo de lo que se vivió en su época.