Marlaska echa la culpa a la ONU y dice que se ha invitado a las víctimas al congreso pero éstas lo niegan

• Luz Sela
• Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.
• • 25/08/2022 17:33
  • Actualizado: 25/08/2022 21:32

El Ministerio del Interior ha admitido que no ha invitado a las asociaciones de víctimas de ETA al Congreso Global de Víctimas del Terrorismo que se celebrará los próximos 8 y 9 de septiembre en Nueva York -como ha publicado OKDIARIO- y se ha amparado en que la invitación debía haber sido cursada por la ONU. Según fuentes del departamento de Fernando Grande-Marlaska, desde la organización internacional se ha ofrecido ir como asistentes -sin intervención- a las principales asociaciones españolas que forman parte del patronato de la Fundación de Víctimas, algo que desde la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) desmienten rotundamente.

Esta cita, que será inaugurada por el ministro del Interior, se perfila como un punto de encuentro internacional para abordar el fenómeno del terrorismo y los derechos de las víctimas. Sin embargo, desde las asociaciones, como la propia AVT o Dignidad y Justicia (DyJ) han expresado su indignación por no haber sido invitadas y por el hecho de que el Ejecutivo ni las haya consultado.

España tendrá un papel relevante en este evento que ha promovido de la mano de Naciones Unidas. Tendrá protagonismo en su apertura y en los distintos plenarios y conferencias posteriores que, según se anuncia en su presentación, «contarán con las asociaciones de víctimas, organizaciones de la sociedad civil, expertos, académicos y el sector privado».

En las distintas sesiones se tratarán los cambios experimentados por el fenómeno del terrorismo, los derechos de las víctimas o cómo mejorar los planes de «rehabilitación, apoyo y asistencia». También se dedicará una especial atención a los colectivos más vulnerables que sufren la violencia terrorista, como niños y jóvenes, y las medidas para atender sus necesidades específicas. El acceso a la Justicia y el apoyo en el proceso penal serán otros de los temas tratados.

«Ahora vemos cómo los terroristas son premiados con terceros grados y cómo se ceden la competencia de Prisiones al País Vasco, y eso hay que contarlo, pero como no quieren que lo contemos, nos vetan», señala. En su lugar, critica, «van a contar que nos damos abrazos con los terroristas», en alusión a los encuentros entre víctimas y verdugos en el marco de la llamada «justicia restaurativa» que defiende el Ministerio del Interior e impulsa también el Gobierno vasco. «No podemos contar el relato que se quiera contar, me parece indigno», ha destacado Folguera.