El comercio alerta de que las ayudas directas de Sánchez son insuficientes: «Seguirán cerrando negocios»

• Andrea Aguado @AguadoRobles
• Redactora de economía y coordinadora de OKMOTOR. Amante de las cuatro ruedas y la industria. Antes en informativos de Radio Televisión Castilla y León.
• • 13/03/2021 13:59
  • Actualizado: 14/03/2021 11:54

El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes un paquete de medidas extraordinarias de apoyo a la solvencia empresarial con 7.000 millones de euros en ayudas directas para reforzar los sectores más afectados por los efectos derivados de la crisis del coronavirus. Uno de ellos es el sector textil, que ha sufrido un desplome de más de 50% de su facturación en 2020 y que ha calificado el plan del Gobierno de Pedro Sánchez de «insuficiente», ya que no evitará el cierre de negocios al cierre de la temporada de invierno.

Así lo ha confirmado el presidente de la Asociación Empresarial del Comercio Textil, Complemento y Piel (Acotex), Eduardo Zamácola, a OKDIARIO que asegurado que «es una buena noticia que el Gobierno de Pedro Sánchez se decida por fin a dar ayudas directas a las empresas más afectadas por la pandemia». «Habrá que leer la letra pequeña de las compensaciones por cierre -tras la declaración del estado de alarma de la que este sábado se cumple un año-, pero la cantidad es insuficiente para tapar el agujero que ha provocado el coronavirus en el textil y que no evitará la realidad que vive el sector: seguirán cerrando negocios», explica.

«Desde Acotex, nos ha sorprendido que el Ejecutivo de Pedro Sánchez destine, de los 7.000 millones de euros que ha puesto en marcha en forma de ayudas directas, 2.000 millones a Baleares y Canarias -las más perjudicadas por los efectos de la crisis del coronavirus- y 5.000 millones para el resto. Es decir que el 7% de la población recibirá el 30% de las ayudas directas, mientras el 93% restante se tendrá que repartir el 70%», explica Zamácola. Un reparto que ha calificado de «no muy equitativo».

En concreto, el presidente de Acotex ha recalcado que «en el reparto de las ayudas directas por comunidades autónomas surgen muchas dudas que no se aclararán hasta que se publique el real-decreto en el Boletín Oficial del Estado (BOE), ya que no nos queda claro como van a recibir las ayudas las empresas que tengan la sede fuera de las islas, pero la mayor parte de sus establecimientos en Canarias y Baleares».

Califican las ayudas de «insuficientes»

Por su parte, Zamácola ha explicado a este diario que «después de un año nos han escuchado y han comprendido que España tiene que seguir la misma línea del resto de países de la Unión Europea (UE), como es el caso de Alemania, Reino Unido o Francia, ya que con moratorias y avales no se salva al tejido empresarial». Así ha destacado que «las ayudas llegarán demasiado tarde, ya que miles de negocios del sector textil ya han cerrado la persiana de forma definitiva y 5.000 dependen de la rapidez con las que las comunidades autónomas, encargadas de gestionar las compensaciones, hagan llegar las cantidades a los empresarios».

«Todo apunta a que van a ser muy insuficientes para las pérdidas que ha registrado el sector a consecuencia de la pandemia, pero habrá que esperar a leer la letra pequeña con la que siempre nos sorprende el Gobierno», recalca. Unas ayudas que llegan después del fracaso de las medidas urgentes de apoyo al sector turístico, la hostelería y el comercio, a las que sólo han tenido acceso el 3% de las empresas.

Las condiciones

Las empresas que soliciten las ayudas tendrán que cumplir una serie de condiciones, entre ellas mantener su actividad hasta junio de 2022 o estar al corriente de los pagos de las obligaciones tributarias y de la Seguridad Social: «Me parece razonable que el Gobierno pida a las empresas que tengan que mantener su actividad hasta el 31 de junio de 2022, ya que no se debe invertir en empresas que vayan a cerrar pasado mañana. Lo que estamos buscando es la supervivencia del tejido empresarial», opina Zamácola.

El sector insiste en reclamar medidas «urgentes y específicas» que viene reclamando desde hace meses, por el golpe que ha asestado las medidas restrictivas de los distintos gobiernos al comercio. Entre ellas, prorrogar los expedientes regulación temporal de empleo (ERTE) hasta final del año, condonar impuestos, tasas, tributos y cuotas de la Seguridad Social y ayudas para poder despedir porque de lo contrario las empresas tendrán que cerrar definitivamente».