La Liga puede avivarse aún más este fin de semana. La lucha por el liderato pasa por el Real Madrid – Valencia, que contará con la presencia de Alejandro Hernández Hernández, el encargado de pitar el partido. Y, teniendo en cuenta los últimos precedentes del árbitro canario, no se puede descartar que equipos como el Atlético o el FC Barcelona empiecen a recortar la amplia diferencia con la que cuentan los blancos. El colegiado vuelve al Santiago Bernabéu cuatro años después y hará tras haber ampliado su historial de polémicas contra el conjunto madridista.
La última visita del árbitro al estadio data de febrero de 2018. Fue en un partido en el que el Real Madrid no tuvo apenas problemas para doblegar a la Real Sociedad, a la que se impuso por 5-2. Sin embargo, desde entonces, ha arbitrado en 10 encuentros a los madridistas, acumulando varias decisiones que han ido en contra de sus intereses y con un balance de cuatro victorias, otros tantos empates y dos derrotas.
El conjunto blanco se ha visto especialmente perjudicado por las decisiones del árbitro en los dos Clásicos que ha pitado el Hernández Hernández. Los dos se disputaron en el Camp Nou y acabaron en empate, pero en ellos los madridistas no quedaron nada satisfechos con la actuación del colegiado.
En el primero de ellos, en la temporada 17-18, reclamaron un claro penalti sobre Marcelo que no se concedió y una falta de Suárez sobre Varane en la jugada del tanto que ponía 2-1 al Barça. Entonces no había VAR, pero sí que lo tuvo a su disposición en la temporada 19-20, cuando no acudió a ver dos claros penaltis cometidos sobre Varane: uno al sufrir un agarrón al querer rematar y otro al clavarle Lenglet los tacos en el muslo.
Y, es que, Hernández Hernández no suele hacer caso a la tecnología cuando pita al conjunto blanco. Se vio en el último derbi que dirigió, el del pasado curso en el Metropolitano. Entonces, se le llamó para ver una mano de Felipe en el área, que impidió el remate en el segundo palo de Casemiro, pero decidió no conceder la pena máxima, siendo además la primera y única vez que acude al monitor para no rectificar su decisión.
Poco antes del confinamiento, en la temporada 19-20, el colegiado también estuvo al frente de un Levante – Real Madrid que acabó con 1-0 para los granotas. El anterior precedente era aquel polémico empate sin goles en el Camp Nou y, en el Ciutat de Valencia, Sergio Ramos acabó enfrentado al colegiado, al que se dirigió preguntándole si «tenía algún problema personal» con los jugadores del equipo.
Un historial nada imparcial
Pero no son los únicos encontronazos que el colegiado ha tenido con el conjunto blanco. Es sobre todo en los Clásicos donde se ha visto la parte más antimadridista de Hernández Hernández. Lejos de ser imparcial, el árbitro ha protagonizado grandes escándalos a lo largo de su carrera en los encuentros entre los dos grandes, siempre barriendo a favor de los culés.
Entre sus grandes hits, más allá de lo señalado antes, una roja a Ramos más que rigurosa por una falta sobre Messi en su último Clásico pitado en el Bernabéu. Aquella tarjeta condicionó un partido que acabó 2-3 con un tanto del argentino en la última jugada del encuentro. Precisamente, en ese mismo encuentro no señaló un penalti de Mascherano sobre Cristiano Ronaldo.
Un año antes ya había tratado de chafar la fiesta madridista en el Camp Nou, al anular un gol legal a Bale al interpretar que cometió falta sobre Jordi Alba al saltar para cabecear el balón. La falta no existió y el gol no subió al marcador, aún así los madridistas terminaron llevándose los tres puntos.
Tampoco se puede olvidar lo sucedido en la derrota ante el Girona en Montilivi en 2017 por 2-1, donde se comió una mano de Aday que salvó el gol del conjunto blanco sobre la misma línea y dio como válido el tanto de la victoria, cuando había fuera de juego, o un penalti sobre Theo no señalado, en esa misma temporada, en un 1-1 ante el Levante.