Marcelo comienza en Riad el que será su desafío final como jugador del Real Madrid. El que es uno de los dos mejores laterales izquierdos de la historia del club blanco, junto a Roberto Carlos, está viviendo su última temporada en la entidad madridista, pero antes de salir en una última aventura que será, posiblemente, en Brasil o de colgar las botas, según lo que termine decidiendo cuando acabe el presente curso, tiene el reto por delante de superar a Paco Gente como el jugador madridista que más título ha ganado.
Por el momento suma 22 entorchados en su palmarés, los mismos que Sergio Ramos y Manolo Sanchís, por lo que si los blancos ganan al Athletic la final de la Supercopa de España igualará al único jugador que ha sido capaz de levantar seis veces la Copa de Europa. Luego, tendría por delante tres opciones (Liga, Copa y Champions) para superar a La Galerna del Cantábrico y ampliar su leyenda en el Real Madrid.
Todo empezó el 15 de junio de 2007. Marcelo había llegado unos meses antes al Real Madrid y en su primera temporada alzó la Liga. Un título que está en la memoria de todos los madridistas, ya que fue la Liga del clavo ardiendo, donde los blancos remontaron puntos y un gran número de encuentros para terminar haciéndose con el campeonato. Al comienzo de la siguiente temporada llegó la Supercopa de España ante el Valencia y una nueva Liga, la del pasillo del Barcelona al campeón en el Bernabéu.
Tras unos años complicados para el Real Madrid, la llegada de José Mourinho dio el pistoletazo de salida a la conquista de títulos. La Copa del Rey de 2011, una nueva Liga y una Supercopa de España en 2012 fueron los campeonatos que ganó Marcelo con el luso como entrenador. Aunque sin duda la etapa más bonita la vivió con Ancelotti y Zidane como técnicos. En esos años, ganó cuatro Champions, dos Ligas, una Copa, cuatro Mundiales de Clubes y tres Supercopas de Europa.
Ahora, como capitán, quiere seguir ampliando su palmarés y ponerse a la altura del presidente de honor del Real Madrid. Además, este título sería muy especial para el brasileño ya que sería la primera vez que los blancos ganan un trofeo con él como capitán.
