Lunin vuelve para competir el puesto a Courtois. No es fácil el reto y el ucraniano lo sabe, pero lo que tiene claro es que no se limitará a ser un segundo portero que se conforme con jugar la Copa y poco más, él quiere demostrar que puede ser una alternativa, aunque el belga haya terminado la temporada a un nivel extraordinario y haya conquistado el Zamora en Liga.
La segunda mitad de temporada en el Oviedo ha venido muy bien a un Lunin que llega a Valdebebas con ganas de demostrar. El club está convencido de su potencial, por ello no ha peleado por retener a Areola, que tiene su futuro en la Premier League. El ucraniano ha jugado 20 partidos con los asturianos, en los que ha dejado la portería a cero en seis ocasiones y, lo más importante, ha demostrado su capacidad como portero de élite. Sin duda, ha sido uno de los jugadores claves en la salvación.
Después de pasar con más pena que gloria por el Leganés y el Valladolid, un tercer préstamo al Oviedo ha permitido que el mejor portero del último Mundial sub-20 cuente con unos minutos tremendamente necesarios y que le han dado la oportunidad al Real Madrid ver que en este espigado guardameta hay mucho futuro.
En el Real Madrid hay muchas esperanzas puestas en un portero que tan sólo tiene 21 años y que aprenderá de uno de los mejores del mundo como es Courtois. Ambos trabajarán mano a mano en Valdebebas bajo la supervisión de Roberto Vázquez, entrenador de porteros del club y uno de los hombres de confianza de Zidane.
Si bien es cierto que en la próxima temporada como segundo arquero blanco no jugará todo lo deseado, Zidane se caracteriza por dar oportunidades a todos sus guardametas, tal y como ha pasado esta temporada con Areola. Por ello, desde Valdebebas creen que es mejor que siga creciendo y trabajando en la que esperan que sea su casa durante muchos años que estando cedido en diferentes clubes.
Un portero moderno
Lunin llegó sin hacer ruido hace dos veranos a cambio de 8,5 millones de euros. Un desconocido que sorprendió a todos porque no dudó en aprender de memoria el discurso que dio en su presentación en un perfecto español. El ucraniano reúne todos los requisitos que debe tener un portero moderno: es alto, tiene un poderoso físico, bajo palos es sobrio y posee un buen juego con los pies.
En el Real Madrid le comparan con Courtois, aunque reconocen que “su juego con los pies es mejor”. Sin duda, una cualidad que cada día se valora más en los porteros. Ahora, tendrá la oportunidad de aprender a la sombra de uno de los mejores hasta que esté preparado para competir de tú a tú por la portería del Santiago Bernabéu.
