James Rodríguez está cerca de firmar con el Manchester United. Los Red Devils, con Jorge Mendes –agente del colombiano– como mediador, han acelerado los contactos con el club blanco y han hecho llegar una oferta que parecer convencer en términos económicos. Son 25 millones de euros los que pondría encima de la mesa el club inglés para llevar a Old Trafford al cafetero y poner fin a un etapa ciertamente infructuosa en la capital española, donde no cuajó con Zidane.
Descartado el Atlético, que lo quería gratis, y supeditada la operación a que Real Madrid y Manchester United concluyan su participación en Europa, Champions y Europa League, respectivamente, será entonces cuando el colombiano pueda decir que firma por su quinto grande del viejo continente. Desde que el joven James aterrizara en el Oporto, todos sus clubes han sido de enorme calado y nunca repitió con diferentes clubes en una misma competición.
De Do Dragao puso rumbo posteriormente a Francia, al Mónaco, donde cuajó una fantástica temporada, la que la valió para dar el paso al frente más importante de su carrera. En 2014 firmó en el Real Madrid, posiblemente el club más importante de su carrera donde ha conquistado dos ligas, dos Champions League, dos Supercopas de Europa y una de España. Pese a ello, nunca terminó siendo indiscutible, sobre todo tras la llegada de Zidane.
Su cesión al Bayern de Múnich durante dos temporadas le permitió alcanzar su cuarto club grande, éste en Alemania. Era su cuarto club, su cuarto país y allí tampoco faltarían los títulos. En las dos campañas, donde tampoco fue indiscutible, conquistó dos Bundesligas, una DFB Pokal y dos Supercopas de Alemania. No se puede olvidar que también alzó trofeos en Portugal con tres campeonatos ligueros, una Taça de Portugal, tres Supercopa lusas y una Europa League. Francia fue el único que se le resistió, se tuvo que conformar con el subcampeonato liguero.
Así, el colombiano cumple otro de sus objetivos y probará en una competición tan importante como la Premier League, que se le resistía hasta el momento y en el que su juego puede brillar. Se le escapará aun así el Calcio italiano, que pese a que tuvo opciones cuando Ancelotti estuvo en el Nápoles, quedará como un deseo que podría tener su conquista dentro de algunos años.