En estos tiempos en los que los insultos racistas estás más perseguidos que nunca, lo ocurrido entre Cucurella y Militao en el Getafe-Real Madrid de este sábado va a ser una de las noticias polémicas de las semana. El futbolista azulón, cedido por el Barcelona, sabrá qué dijo exactamente al defensa brasileño, pero a la vista de las imágenes televisivas parece le espeta: «¡Cállate la boca, puto mico!».
Corría el minuto 52, con el 0-1 en el marcador, cuando un lance del juego acabó con ambos jugadores encarados, reprochándose cosas pero sin llegar a agredirse. Una conversación subida de tono que acabó con esa frase de Cucurella que el futbolista desmintió después en zona mixta. Según el catalán, sus palabras fueron «¡Cierra el puto pico!», algo que ni viendo en bucle la repetición ofrecida por la televisión parece quedar demostrado.
El árbitro no se percató de ello y no recogió nada en el acta, por lo que lo normal es que Cucurella no sea sancionado por el Comité de Competición, aunque en el Real Madrid no ha sentado nada bien ese «puto mico» que parece que le dice a Militao, un insulto racista de esos que tanto se persiguen en estos momentos. Habrá que ver si Competición entra de oficio o si el club blanco lo denuncia para que se tome alguna medida contra el jugador del Getafe.
Un mico es un mono de pequeño tamaño y cola larga, es decir, es como si le hubiera llamado «mono», insulto tan malsonante como racista. Además, mono en catalán –lengua que también maneja Cucurella– se dice mico.