Transcurrida la primera semana de obras tras el final de la temporada podemos afirmar que los pronósticos de tener un verano frenético se están cumpliendo con creces. Por eso, un día más, nuestro experto en las obras del Bernabéu, Eduardo Bañón del canal de Youtube Fanáticos Real Madrid, nos cuenta de primera mano cuales son las últimas novedades en un estadio que afronta la recta final de su transformación, prestando especial atención a una de las instalaciones más espectaculares, el hipogeo y los primeros movimientos de las bandejas del césped retráctil.
Durante esta semana post final de temporada estamos comprobando cómo se están acelerando todos los trabajos en el estadio, tanto en los exteriores donde se ha incrementado notablemente la llegada de nuevos materiales y maquinaria, como en el interior donde estamos viendo trabajos realmente importantes para el Santiago Bernabéu.
Mientras continúan los trabajos para la instalación del anillo LED del primer anfiteatro, la estructura del videomarcador 360º en el fondo Sur o los avances para la sustitución de los asientos del estadio; sobre el terreno de juego vemos cómo una de las grandes apuestas del Real Madrid para su estadio comienza a funcionar. Nos estamos refiriendo al sistema mecanizado para el césped y el hipogeo (esa gran galería bajo el terreno de juego y las gradas del lateral Oeste que servirá como invernadero para el césped del estadio).
Primeras pruebas
Una vez terminada la temporada se ha podido comenzar con las primeras pruebas de este novedoso sistema. Tras las pruebas de apertura y cierre de la tapa del hipogeo y los sistemas de ascenso, descenso y retención han comenzado a introducir dentro del hipogeo las primeras bandejas del césped retráctil. En estos momentos ya contamos con dos, de las seis bandejas que componen el terreno de juego, dentro del hipogeo. La idea para este verano es dejar guardadas las seis bandejas, mientras se sigue trabajando en ellas durante el verano, para liberar toda la losa de hormigón en la zona central del estadio y de esta manera poder trabajar en las distintas zonas del estadio, especialmente en la estructura del videomarcador 360º que cuelga de la cubierta fija del Santiago Bernabéu.
