Es preocupante, pero reconozco que he tenido este pensamiento otras veces en este momento de la temporada. Puedo recordar casi todos los años tener una visión crítica sobre el momento del Madrid en los principios de temporada. Después la realidad suele ser que las temporadas acaban en Cibeles.
Ahora mismo el Madrid tiene tres problemas que paso a enumerar en orden inverso de relevancia:
- El Real Madrid está en un momento físico bajo. Se puede observar cómo se pierden muchos duelos y falta velocidad en muchas acciones. El equipo se parte cuando busca ser más agresivo. Considero este problema el menos relevante porque creo que la solución vendrá sola con el paso del tiempo. No es culpa de Ancelotti ni de la plantilla la escasa pretemporada.
- El Madrid tiene un problema de juego alarmante. El equipo no se sabe juntar salvo si es en bloque bajo, no consigue organizar una presión tras pérdida que optimice los esfuerzos de los jugadores y la salida del balón no está nada trabajada. Resulta difícil explicar cómo un equipo con tantos cracks puede jugar tan mal.
- Hay un problema de actitud propio de un equipo que padece el síndrome de barriga llena. Se nota que no hay el fuego de antaño en muchos jugadores y los duelos se disputan con menos intensidad. Este es el problema más alarmante, ya que el Madrid puede sobrevivir a jugar mal si la actitud es buena, pero nada se sostiene cuando faltan las ganas necesarias.
Ancelotti tiene el enorme reto de seguir demostrando que es el entrenador adecuado para esta temporada. Para ello debe trabajar más al equipo y dejar atrás la figura de Kroos, pero también debe conseguir volver a motivar a unos futbolistas que han levantado un poco el pie del acelerador.
Conviene tener memoria y no dar por quemado todo por un mal comienzo de temporada. El Real Madrid suele resurgir en este tipo de momentos y la derrota puede ayudar a agitar el ambiente, pero negar lo evidente no ayudará a solucionar las cosas y Ancelotti lo sabe.