El Real Madrid Castilla volvió a perder en el Alfredo di Stéfano, esta vez contra el Mérida, y ya acumula cinco jornadas sin conocer la victoria tras cosechar dos derrotas consecutivas. El cuadro extremeño tiró de experiencia, anotó un gol a los 30 segundos del segundo tiempo y se llevó los tres puntos de Valdebebas ante un equipo sin alma.
El Real Madrid regresaba al Alfredo di Stéfano con la necesidad de volver a ganar. Los blancos acumulaban cuatro partidos sin ganar, y estaban casi obligados a hacerlo delante de su afición. Por ello Raúl salió con todo. Un once lleno de titulares. Mario Martín y Nico Paz, incluidos en la convocatoria con el primer equipo para viajar a Leipzig, eran titulares.
El partido comenzó muy parejo. Poco pasaba en Valdebebas. El Real Madrid Castilla empezó dominando el partido, pero tardó muy poco en perder el control del encuentro. Pocas ocasiones tuvieron los blancos en los primeros 45 minutos.
La más clara del primer filial blanco fue de Gonzalo al filo del descanso. El atacante blanco perdonó un mano a mano ante Palomares. Logró regatear al portero y no pudo definir. Antes, el Castilla tuvo un cabezazo desviado de Mario Martín y una falta de Nico Paz que despejó el guardameta como únicas ocasiones.
También el Mérida tuvo las suyas en el primer tiempo. Chuma estrelló en el poste un cabezazo y Mizzian perdonó un dos para uno. La igualdad reinó en la Ciudad Real Madrid, pero la balanza se podía decantar para cualquiera de los dos lados. Las dudas en la mala dinámica blanca generaban nerviosismo en los chicos de Raúl.
El Mérida hizo el único gol del partido
La balanza se decantó del cuadro extremeño nada más comenzar el segundo tiempo. No llevábamos ni 30 segundos de segunda mitad cuando la pelota cayó al segundo palo, dentro del área, y Llácer empaló una pelota de manera brutal para batir a Mario de Luis y hacer el 0-1. Un gol que a la postre iba a ser definitivo.
Raúl estaba desesperado en la banda. Veía que su equipo no estaba. El Castilla había perdido su alma y atacaba sin fe. En el 66 movió el banquillo el técnico madridista dando entrada a Manuel Ángel y Aparicio por Theo y Palacios. Aparicio lo intentó como el que más, pero no tuvo fortuna.
Solamente hizo tres cambios Raúl, que no lo veía nada claro. El tercero fue darle entrada a Víctor Muñoz en los instantes finales por Gonzalo. También lo intentó todo, pero no hubo fortuna. El Castilla terminó atacando, pero sin meter al Mérida en su área. Las más claras las tuvo el cuadro extremeño a la contra. Sin fe, sin alma y sin ideas terminaron los blancos.
El Mérida ganó el partido, empieza a creer en la salvación y el Castilla se mete en un lío con esta derrota, que confirma una mala dinámica con cinco jornadas sin ganar. Además, los blancos no ganan en casa desde el pasado 3 de diciembre ante el San Fernando. El primer filial blanco termina la jornada a solamente siete puntos del descenso tras perder ante un rival que está metido en el pozo. Los blancos le dieron vida al Mérida y ven el descenso como un peligro real a partir de ahora.