Ya no quedan equipos invictos en la Liga Endesa. Después de ocho jornadas en las que la victoria fue el único resultado a conocer, el Real Madrid cayó (82-81) en Miribilla ante un meritorio RetaBET Bilbao Basket que forzó a los madridistas hasta una prórroga en la que las malas decisiones les condenaron a su primera derrota del curso en la competición doméstica, en la que a pesar de ello sigue como líder.
La principal novedad del choque, por encima si cabe de la derrota del Madrid, fue el debut en la presente temporada de Trey Thompkins. El ala-pívot norteamericano permanecía apartado por su bajo estado de forma y después de sumar los entrenamientos suficientes con el grupo, Pablo Laso se decidió a darle la alternativa en partido oficial, en lugar de Gabriel Deck y sin los resultados esperados.
Thompkins completó un -7 de valoración que deja constancia de que aún le falta para llegar a niveles óptimos en el plano físico y también en cuanto a la inspiración se refiere, con la muñeca algo oxidada debido a la inactividad. El americano, sin embargo, no fue el único que tiró mal en el Madrid, desconocido en el triple y donde incluso su mejor hombre, Sergio Llull, necesitó de 20 tiros de campo –sólo seis acertados– y once tiros libres para completar 24 puntos.
Bilbao, que tampoco cuajó su mejor choque en cuanto a acierto, pero sí en términos de esfuerzo, tuvo en Axel Bouteille, con 22 puntos y 6 rebotes, al mejor hombre del partido y clave en el triunfo de los de Álex Mumbrú en la prórroga. Primero Llull y después precisamente Thompkins tuvieron en sus manos la canasta del triunfo en Bilbao, pero finalmente fueron los locales, no sin suspense, los que se llevaron el gato al agua para convertir en mortal al Real Madrid de Pablo Laso.