La victoria del Real Madrid ante el Valencia tuvo en Marco Asensio a su personaje más destacado por lo emotivo de su regreso, alimentado por un bonito gol en el primer balón que tocaba en partido oficial desde su fatídica lesión en julio. Sin embargo, si nos quedamos con lo tangible, el rey del choque fue Karim Benzema. El delantero francés ejerció más que nunca de lo que muchos le piden que sea, un ‘9’ rematador con estadísticas destacadas e influencia histórica.
El doblete de Karim le permite lograr dos estadísticas destacadas en una. Con la primera, alcanza los 20 goles, algo que ha logrado ya en ocho temporadas desde que llegara al Santiago Bernabéu en 2009 y de lo que sólo pueden presumir Raúl, Di Stéfano y Cristiano Ronaldo. Además, con su segundo tanto al Valencia, Benzema se coloca con 243 tantos como madridista y llega al Top 5 de goleadores históricos del club, superando a una leyenda como Ferenc Puskas.
Y es que Benzema, y es algo que se confirmará con los años, también es una leyenda del Real Madrid. El francés ha sido capaz de vencer a su frío carácter y en ocasiones insuficiente olfato con una calidad fuera de toda duda, que se ha visto acompañada con una subida en la puntualidad de cara a gol desde la marcha de Cristiano Ronaldo. En la presente temporada, Karim está asentado como el máximo goleador madridista en Liga y Champions, y segundo tras Messi en la tabla global de la competición doméstica, con 16 dianas.
Los tantos de Benzema frente al Valencia son una prueba de fuego de su mutación a killer. Después de una notable actuación como asistente frente al Eibar, el ‘9’ detectó la sequía de su equipo en términos de determinación y por dos veces, batió a Cillessen con sendos remates inapelables. Mención especial merece el segundo, que desde su conversión pasó de inmediato a ser uno de los mejores de la Liga, con un control excelso y una volea con la pierna izquierda a la mismísima escuadra.
Dependientes del gol de Benzema
Del acierto de Benzema dependen muchas de las posibilidades del Real Madrid en el campeonato. El francés es la vía más segura de cara a gol dentro de un equipo sobrado de talento, pero en el que el instinto rematador no es una de las virtudes de sus jugadores más virtuosos –Hazard, Vinicius, Isco, Modric–. Tampoco lo fue durante un tiempo para Benzema, pero el galo parece haber llegado a su cénit en estas lides en el momento justo.