Barcelona y Real Madrid llegaron al Camp Nou sobre las 18.00 horas sin incidentes. Los Mossos d’Esquadra blindaron los autocares de ambos equipos con el objetivo de que llegasen al estadio azulgrana sin sufrir ningún tipo de altercado, cosa que finalmente sucedió.
Primero salió la comitiva formada por el cuerpo arbitral, después fue el turno del Barcelona y por último los dos autobuses que transportaban tanto a la plantilla madridista como a la directiva y demás trabajadores del club. Todos ellos llegaron sin problemas al Camp Nou.
Por primera vez en la historia, Barcelona y Real Madrid compartieron hotel de concentración antes de la disputa de un Clásico. Las amenazas del Tsunami independentista obligaron a tomar esta decisión. Los dos equipos llegaron al hotel Sofía sobre las 12:00 horas y en el alojamiento pasaron toda la jornada, hasta que pusieron rumbo al estadio.
La zona del Camp Nou se protegió para evitar que ningún radical se pudiese salir con la suya. Desde primera hora de la mañana los Mossos d’Esquadra y la Guardia Urbana se encargaron de acordonar la zona, creando un gran perímetro de seguridad que evitase cualquier tipo de altercado.
